El último clásico universitario entre la U y la UC, disputado en el estadio Nacional en mayo pasado, dejó momentos emotivos dentro del campo de juego que muchos hinchas aún no olvidan. Fuera de la cancha, en tanto, se produjo un incidente en la previa que pasó desapercibido y ha salido a la palestra en las últimas horas.
Resulta que fanáticos ‘cruzados’ ingresaron seis horas antes del juego al recinto de Ñuñoa e instalaron una ofrenda floral, en el sector de la Memoria de los detenidos desaparecidos, en homenaje a Francisca Sandoval. Se trata de la periodista de Señal 3 de La Victoria y fanática cruzada que murió en 2022 al recibir un impacto balístico mientras cubría la marcha del Día del trabajador.
Fue la agrupación Católica Para Su Gente la que llevó a cabo la actividad y afirmaron que lo hicieron bajo el alero de la Corporación Estadio Nacional Memoria Nacional Ex Prisioneros Políticos. Sin embargo, minutos después de haber dejado la corona en su sitio, funcionarios de seguridad y de Azul Azul se hicieron presente para exigir el retiro de la misma, teniendo en cuenta que el cotejo contemplaba sólo presencia de ‘azules’ y el acto podía generar un problema mayor. Ahí se produjo un ‘encontronazo’, sobre todo porque lo instalado contaba también con una imagen del ‘Mumo’ Tupper.
“El arreglo exigía justicia para Francisca, y la reconocía como hincha cruzada con conciencia social a través de la consigna ‘Porque soy del otro bando’. Se trata de un frase en conmemoración a lo que dijera Raimundo Tupper para oponerse a votar por la opción Sí en el plebiscito de 1989″, justificaron desde CPSG.
“Tras una larga discusión, solicitaron a funcionarios policiales que estaban en el lugar que les realizaran un control de identidad a los hinchas cruzados, a lo cual ellos accedieron sin oponer resistencia. Finalmente se retiraron del lugar, solamente con el disgusto por el altercado”, detallaron desde la agrupación.
El veto de La U a hinchas cruzados por arreglo foral
“Sin embargo, en las semanas siguientes los afectados no pudieron ingresar a otros estadios para los partidos que disputó la UC, pues se les indicó que contaban con una prohibición de ingreso a los espectáculos de fútbol profesional”, agregaron, acotando que “al consultar sobre dicha situación, fueron informados que el club Universidad de Chile había aplicado el derecho de admisión”.
En específico, los hinchas de la UC involucrados recibieron 6 y 2 años de sanción, respectivamente, lo que se explica en 2 por “ingreso indebido” y 4 por “introducir elementos que afecten la seguridad del encuentro deportivo”.
La situación indignó a los cruzados. “Es sumamente injusta y grave, porque se trató de un acto de memoria realizado de manera respetuosa y autorizada, en el que nunca existió un afán violento”, afirmó, Jorge Villavicencio, presidente de la Corporación Católica Para su Gente.
“Implica que cualquier club puede vetar de todos los estadios a las personas que quiera de manera arbitraria, tergiversando una herramienta que debiera ser para alejar del fútbol a quienes cometan delitos y generen violencia, no a quienes realicen actos de memoria o simplemente quieran ejercer su derecho a la libertad de expresión”, añadió, puntualizando que los castigados presentaron un recurso de protección con el patrocinio del abogado de la entidad.
En la U acusan provocación y presencia de barristas cruzados
Al ser consultados por BioBioChile por esta situación, desde la U confirmaron el incidente, pero aseguraron que todo se originó por la presencia de barristas de Católica que ingresaron sin autorización al Coloso de Ñuñoa.
En Azul Azul defendieron su postura de solicitar el Derecho de Admisión. Explicaron a este medio que el recinto, en ese momento, estaba en manos de ellos como club organizador del evento, pues había sido entregado un día antes por motivos de seguridad y logística.
Desde la administración de la ‘U’ hicieron hincapié en que cualquier evento de ese tipo, además, debe ser avisado antes a la ANFP, porque también podría significar una multa para el equipo a cargo del espectáculo.
Por otro lado, remarcaron que el hecho de que estuviese Raimundo Tupper y otros símbolos del cuadro cruzado -como el escudo- incluso pudo ocasionar un conflicto mayor, ya que podría considerarse una provocación.
Finalmente, en Azul Azul aseguran que desde la Corporación del Memorial les ofrecieron disculpas por lo ocurrido, y sostuvieron que los hinchas ‘cruzados’ deben ir a la justicia a solicitar -si procediera- la eliminación del derecho de admisión.
