Para nadie es secreto que Sergio Jadue se ganó más de un detractor durante su estadía en el sillón presidencial de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP).

Y es que su carácter confrontacional y hasta poco amigable, sumado a sus constantes desaciertos en el manejo de la institución, hicieron que con el pasar de los años éste fuera sumando más adversarios que adeptos.

Si bien algunos fueron cautos y prefirieron mantener en cierto secreto las diferencias que tenían con el ex mandamás del fútbol criollo, otros no se guardaron nada y le ‘tiraron toda la caballería’ encima cada vez que tuvieron la oportunidad.

Tal fue el caso del periodista chileno Felipe Bianchi, quien llegó a ser considerado por el propio Jadue como su máximo enemigo comunicacional, producto de las constantes críticas y análisis que el comentarista realizó respecto de la dirección del extimonel en la ANFP.

Bajo ese contexto, es que quisimos traer hasta el presente tres momentos que marcaron la estrecha y casi conflictiva relación que tuvieron por largos pasajes ambos reconocidos personajes.

Insultos, gestos obscenos y ofrecimientos de golpes

Uno de los momentos más tensos e incómodos que marcaron la casi combativa relación que Jadue y Bianchi tuvieron, se dio el 16 de octubre del año 2012.

Ese día Chile se dio cita ante Argentina por la décima fecha de las eliminatorias rumbo al Mundial de Brasil 2014, en lo que fue el último partido de Claudio Borghi al mando de La Roja, y donde el ‘equipo de todos’ cayó derrotado por 2-1

Por ese entonces, la imagen del periodista ya estaba completamente asociada a la oposición del ‘calerano’, sus seguidores y familiares, y estos últimos le hacían notar el rechazo y descontento que les generaba su labor cada vez que tenían la oportunidad de hacerlo.

De hecho fue por esto mismo que casi nadie se sorprendió cuando los familiares de Jadue comenzaron a insultar y a realizar gestos obsesos en contra del comunicador deportivo, quien se encontraba trabajando y comentando la actuación de La Roja frente a la Albiceleste.

Si bien no se sabe cuál fue el motivo que gatilló el enojo y la euforia de los parientes del exdirectivo, sí se sabe que estos estaban tan molestos que solo querían traspasar la pared de vidrio que los separaba para ir a golpear al periodista.

Bianchi, por su parte, caldeada aún más los ánimos, ya que les respondía tirándoles ‘besitos’, guiñándoles los ojos y haciendo el casi inequívoco gesto con las manos que alude al robo.

Pero el entuerto no quedó solo en eso, puesto que de acuerdo a lo señalado por algunos testigos del hecho, el profesional de las comunicaciones también les habría ofrecido a los familiares del presidente ‘arreglar a golpes’ sus diferencias.

Espectadores de la engorrosa situación fueron el relator Paulo Flores, el comentarista Patricio Yáñez, productores, editores y camarógrafos de Chilevisión, y aquellos aficionados que habían comprado sus boletos en el sector preferencial del recinto deportivo.

La historia no pasó a mayores, ya que hubo intermediarios que calmaron las aguas y lograron que todo siguiera su rumbo normal.

En la transmisión oficial del cotejo no se mostró absolutamente nada del hecho, aunque no se pudo evitar que el tema fuera el centro del comidillo que se dio en las instalaciones del recinto deportivo.

“Allí estaba Bianchi…calladito, hasta me trató de presidente”

Otro comentado momento en la vida de ambos se dio la noche del martes 15 de octubre de 2013, cuando La Roja se impuso por 2-1 a Ecuadory logró la clasificación a la Copa del Mundo de Brasil 2014..

Los goles de Alexis Sánchez y Gary Medel desataron la alegría de los 45 mil espectadores que esa tarde llegaron hasta el Nacional, así como de quienes seguían la transmisión que el relator Paulo Flores, el exseleccionado Patricio Yáñez y el periodista Felipe Bianchi estaban realizando por las pantallas de CHV.

Abajo de la caseta en que estaban los profesionales se encontraba Pablo Morales, por ese entonces gerente de producción de Chilevisión, quien había encomendado que luego del importante cotejo se le realizara una entrevista al entonces presidente de la ANFP.

La orden del jefe fue recibida por Gerardo Sánchez, editor periodístico de dicha transmisión, quien encargó que la entrevista se realizara o en el campo de juego o en los camarines, a fin de evitar que Jadue y Bianchi se encontraran y vivieran un complicado e incómodo episodio.

Eso sí, nada de esto ocurrió, ya que el ‘calerano’ se las arregló para salirse con la suya y, en un descuido, se metió en la caseta en que estaban Flores, Yáñez y Bianchi para obligar a que éste último lo entrevistara personalmente.

La tendenciosa petición ‘pilló’ más que desprevenido al comentarista deportivo que, pese a su asombro, no tuvo otra opción que acceder a la orden del directivo.

Testigos recuerdan que le realizó un par de preguntas, concretamente sobre el futuro de la ‘Generación Dorada’, las cuales fueron respondidas sin problema alguno por el presidente.

Sergio Jadue, en tanto, quedó satisfecho y más que feliz, y no dudó en comentar lo que consideraba una victoria personal a sus familiares, asesores y círculo cercano más cercano.

“Allí estaba Bianchi..calladito, hasta me trató de presidente”, habría llegado comentando el exdirigente de la ANFP en los camarines del reducto capitalino.

Para Felipe Bianchi, en cambio, la realidad fue otra totalmente distinta. “Nunca estuve calladito. La transmisión la llevaba yo y es redifícil callarme. De hecho, no se me olvida su imagen: él estaba muy nervioso, transpiraba, tartamudeaba. Está claro de dónde vino la cobardía y de quién fue la victoria”, indicó el periodista en su momento.

“¿Qué vai’ a opinar ahora, huevón?”

Pese a que los bochornosos momentos en la ‘relación’ de Felipe Bianchi y Sergio Jadue eran casi pan de cada día, también hubo episodios un tanto anecdóticos y hasta para la risa.

Uno de ellos tuvo cabida el 09 de junio de 2012, en la ciudad venezolana de Puerto de la Cruz, día en que la Selección Chilena venció por 2-0 a Venezuela, gracias a los tantos de Matías Fernández y Charles Aránguiz.

Como el triunfo había dejado más que contentos a todos, los dirigentes de la ANFP no dudaron en invitar a algunos personajes de su círculo más cercano hasta el hotel Mare Mares, lugar en que se hospedaban, para dar rienda suelta a una privada celebración.

Todo iba de maravillas, más que bien encaminado, hasta que el entonces vicepresidente del organismo chileno, Cristián Varela, se encontró frente a frente en el salón central del hotel venezolano con Felipe Bianchi.

Y es que sí, coincidencia o no, dicho lugar era el mismo que semanas antes habían escogido los productores de Chilevisión para alojarse, incluyendo al comunicador y a todo el equipo de CHV, en su paso por tierra llaneras.

“¿Así que era mala idea Borghi, ah? ¡Sabís ene! Ja, ja, ja. ¿Qué vai a opinar ahora, huevón”, le habría gritado a viva voz el exdirectivo al periodista, mientras celebraba la victoria de La Roja con un vaso de whisky en sus manos.

Afortunadamente el intercambio de opiniones pasó rápidamente a un segundo plano, ya que Felipe, quien solo habría respondido “lo mismo de siempre, no ha cambiado nada”, optó por evitar una trifulca y siguió su camino con dirección a su habitación.

Todas estas declaraciones y conversaciones fueron recogidas y publicadas por los periodistas Francisco Sagredo y Fernado Tapia, en el libro “Juego Sucio”, el cual revela detalles inéditos de las diversas situaciones que se dieron en la era de Sergio Jadue al mando de la ANFP.