“Estamos muy mal, pero no es un crisis“, explicaba ayer Pablo Guede luego de que Colo Colo encajara su tercera derrota consecutiva jugando de local en el Campeonato de Apertura.

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Las palabras del estratega exculparon a los jugadores de la responsabilidad y él asumió la carga explicando ser el primer responsable, evidenciando la cercanía y confianza que hasta ahora se ha visto con el plantel desde su llegada al Monumental.

Sin embargo luego del encuentro ante Deportes Iquique, en el que los ‘Albos’ cayeron por dos goles contra cero esa cercana relación habría tenido el primer ‘roce’ en la era Guede, luego de que los jugadores se negaran a seguir las órdenes del estratega trasandino.

El ex entrenador de San Lorenzo quedó molesto con el desempeño de sus dirigidos, por lo que les habría comunicado que debían presentarse hoy por la mañana en Macul para realizar un entrenamiento tal y como lo anticipó en conferencia.

“Vamos a trabajar, trabajar y trabajar más. Vamos a hacer 16 entrenamientos estas semanas. Hay que trabajar“, declaraba posterior a dicho encuentro, aunque al momento de comunicar su estrategia al plantel, la idea no fue muy bien recibida según detalló AS.

Sus dirigidos se habrían negado en forma tajante a ceder el descanso que tenían programado con anticipación, por lo que en definitiva el adiestrador trasandino tuvo que dejar de lado su postura y ceder ante el camarín ‘Albo’.