Flamengo consiguió este jueves su clasificación a los cuartos de final de la Copa Libertadores pese a caer por 1-0 ante Bolívar en los 3.650 metros de altitud de La Paz, con lo que le alcanzó para liquidar la llave con un 1-2 en el marcador global.
Los bolivianos necesitaban remontar el 2-0 en contra del partido de ida en el Maracaná, pero el gol en el minuto 56 de su mediocampista brasileño Bruno Savio no fue suficiente para alcanzar la ansiada remontada.
Los dos equipos plantearon un juego ágil, ya que Bolívar trabajó en construir las jugadas desde su arco y el ‘Fla’ mostró que no renunciaría a atacar.
Pese a lo anterior, con el 1-0 en el marcador, los jugadores del ‘Mengao’ no dudaron en retrasar el juego con burdas maniobras.
Si bien lo anterior no es nuevo en la Libertadores, las avivadas del arquero argentino de Flamengo, Agustín Rossi, exasperaron a los jugadores de Bolívar y también a quienes seguían el encuentro.
Por ejemplo, a los 69 minutos, el guardametas amortiguó un balón con las manos y, al ver que no tenía rivales cerca, la llevó con los pies lo más cerca posible de su arco.
No contento con eso, luego Rossi se agachó en el césped y gateó por el piso cuidando la pelota hasta que, finalmente, la tomó con sus manos.
El arquero de Flamengo también demoró en exceso cada saque de meta, ganándose el desprecio de sus rivales. Incluso, cuando terminó el encuentro, fueron varios los futbolistas de Bolívar los que le negaron el saludo y lo dejaron con la mano estirada.
En cuartos de final de Copa Libertadores, el ‘Mengao’ se medirá a Peñarol de Uruguay.
