Hace algunos días, activistas del clima lanzaron pintura roja y negra a una mansión perteneciente a Lionel Messi, en la isla española de Ibiza, una acción condenada hasta por Javier Milei, quien pidió a España garantizar “la seguridad de los ciudadanos argentinos”.

Miembros del grupo Futuro Vegetal divulgaron un video frente a la casa cerca de Cala Tarida, en la costa oeste de Ibiza, con una pancarta con la leyenda, en inglés, “Ayuda al planeta, cómete un rico. Abolir la policía”.

El millonario cargo que enfretarán los activistas por vandalizar la casa de Messi en Ibiza

En tal sentido, las tres personas que se habían adjudicado el ataque a la mansión de Leo Messi enfrentarán cargos millonarios. Según informó una portavoz de la Guardia Civil, “los cargos que enfrentan los detenidos están relacionados con daños materiales, con un valor estimado en 50.000 euros”.

“Según parece, un trabajador de Messi ha denunciado lo ocurrido, valora en 50.000 euros los daños, pero nosotros nos vamos a oponer. Nos acusan de un delito de daños, estamos en proceso de que el juzgado tramite los primeros documentos para que se solicite que se declare el sobreseimiento de la causa”, aseguró uno de los activistas detenidos.

La defensa de un activista: “Hay que derribar la casa”

Bilbo Bassaterra, es el único varón de los tres detenidos del grupo activista, Futuro Vegetal y tuvo la posibilidad de tomar contacto con los medios y aprovechó para defenderse de la acusación y la posible multa que deberá pagar: “Nosotros vamos a alegar que no se entiende como es posible que nos acusen de generar daños ahí cuando hay que derribarla”.

“Si la construcción es ilegal y lo que debe proceder es el derribo, no tiene sentido que nos reclamen 50.000 euros”, añadió. Medios españoles han reportado que la mansión carece de certificado de ocupación, el cual debe ser emitido por una agencia gubernamental para certificar que está en condiciones habitables, debido a que varias habitaciones fueron construidas sin permiso.