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España consiguió una ajustada clasificación a las semifinales de la Eurocopa tras vencer a Alemania por 1-2 con un gol agónico de Mikel Merino en tiempo extra, en un partido marcado por una polémica jugada que el VAR no advirtió, donde el balón dio en la mano de Marc Cucurella y no fue sancionada. A pesar de los reclamos, el árbitro inglés Anthony Taylor y el VAR mantuvieron su decisión, generando controversia y dejando en evidencia las polémicas del arbitraje y la videoasistencia en Europa.

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Con un tanto agónico y en un partido trabado de principio a fin, España logró una laboriosa clasificación a semifinales de la Eurocopa tras vencer al anfitrión Alemania por 1-2.

Y es que antes del gol de Mikel Merino al minuto 119, en tiempo extra, hubo una jugada polémica que el VAR no advirtió y sobre todo, indignó a toda la parcialidad local.

El armador de juego germano, Jamal Musiala, estuvo a punto de erigirse en héroe, pero justo al 105′, remató a portería y el balón dio en la mano de Marc Cucurella, acción que el árbitro simplemente ignoró.

A pesar de los reclamos, ni el juez inglés Anthony Taylor ni el VAR (que no llamó al réferi) revirtieron su decisión.

Posteriormente y tras consumarse el adiós de Alemania a manos de España en cuartos del certamen continental, la polémica jugada que involucró al lateral hispano de Chelsea se sigue viralizando en redes sociales, dejando en claro que las polémicas del arbitraje y la videoasistencia no solamente tienen lugar en América, sino también, en Europa.