Anna Szilagyi | EFE

Fiesta alemana en la Eurocopa: anfitriones golearon a Escocia y asumen rol de favoritos

Por Pablo Velozo
Con información de Agencia EFE.

14 junio 2024 | 16:57

Alemania goleó 5-1 Escocia en el partido inaugural de la Eurocopa 2024, partido disputado este viernes en el Allianz Arena de Múnich.

Un triunfo contundente e incuestionable, que posiciona a los anfitriones como uno de los favoritos a quedarse con el campeonato europeo de selecciones.

Una presentación que estuvo al borde de la excelencia, con el arquitecto Toni Kroos al frente y con la electricidad de Jamal Musiala, Floriant Wirtz y Kai Havertz.

Así, Julian Nagelsmann demostró que en poco tiempo pudo rearmar el espíritu de la seleccion germana, después de sustituir hace meses a Hansi Flick en la banca.

Una de las soluciones la encontró en una llamada telefónica a Toni Kroos. Convenció al ya exjugador del Real Madrid y todo cambió. La pausa que imprime el centrocampista alemán era clave.

Cada golpeo de Kroos es un lujo que se va perder en breve. El aficionado alemán así lo apreció y aplaudió cada toque de su particular cirujano, que por fin dio sentido al juego de su selección.

Y, Nagelsmann, consciente de ese virtud, ha sabido rodear a Kroos de jugadores perfectos para su juego. A su lado, Andrich, un correcaminos, aporta el músculo que no tiene Kroos; en las bandas, dos puñales jovencísimos: Wirtz y Musiala, con unos insultantes 21 años; de enganche el siempre efectivo Gündogan; y arriba, el mordisco de Havertz.

El propio Kroos, en modo ejecutor, inició la jugada del primer tanto con un cambio de juego milimétrico de banda a banda que recogió Joshua Kimmich. El lateral del Bayern puso la pelota en el borde del área, donde apareció Wirtz para batir a Gunn con un golpeo de primeras.

Era el minuto diez y Alemania ya estaba por delante. Las gargantas germanas pidieron más sangre. Y otra vez Kroos, como no, se la concedió.

Poco después, en el minuto 20, filtró un pase magnífico a İlkay Gündoğan. El jugador del Barcelona cedió la pelota a Havertz y éste, a su vez, se la dio a Musiala, que finiquitó la acción desde dentro del área.

Alemania pisó el acelerador y obtuvo un tercer premio en forma de penalti que transformó Havertz: 3-0 y a la caseta con la expulsión de Porteous por su entrada temeraria sobre Gündogan.

En el vestuario, Nagelsmann no ordenó contención y sus jugadores, algo más pausados, controlaron el resto del choque sin sobresaltos.

Promediando el segundo tiempo, a los 67 minutos, el delantero del Borussia Dortmund, Niclas Füllkrug marcó el cuarto para los germanos. Derechazo al ángulo y desde el punto penal, que hizo estéril la resistencia del arquero Angus Gunn.

El 4-1 de Escocia, ya en el tramo final, lo anotó Antonio Rüdiger, en propia puerta, pero Emre Can repuso la ventaja con el 5-1 en el tiempo añadido.