El Bayer Leverkusen de Xabi Alonso goleó este sábado al Bayern Múnich por 3-0, en un partido que dominó con claridad durante gran parte de los noventa minutos y con el que un dio un paso importante hacia el título de la Bundesliga al relegar a los bávaros a cinco puntos de distancia.
Sólo en los primeros instantes el Leverkusen no fue dominante, pero a medida que pasaron los minutos se fue pareciendo cada vez al equipo que ha dominado casi a placer el torneo alemán y que no mostró complejo alguno ante el gigante de Baviera.
Los dos equipos mostraron ya el respeto mutuo que se tienen con las alineaciones. Tanto Xabi Alonso como Thomas Tuchel cambiaron sus esquemas habituales de cara a las características del rival.
En la etapa inicial en la que tuvo cierta iniciativa, el Bayern no logró fabricar acciones ofensivas dignas de mención y el Leverkusen empezó a plantar cara hasta terminar asumiendo el dominio de las acciones.
El primer aviso fue en el minuto 9, cuando Adli estuvo a punto de robarle una pelota a Eric Dier con lo que hubiera quedado con una autopista abierta hacia la portería de Manuel Neuer. En el 11′ el propio Adli, tras un error de Dayot Upamecano, soltó un remate al cuerpo de Neuer.
El saque de banda siguiente trajo el gol del Leverkusen. Robert Andrich lanzó un centro al área que llegó al segundo poste, donde recibió Josip Stasinic que marcó con un remate de pierna derecha.
El gol le dio confianza al Leverkusen, que empezó a mandar con claridad en el campo. Tuvo más llegada, tuvo más la pelota y ganaba la mayoría de los duelos por la pelota.
El Bayern empezó la segunda parte tratando de mantener la pelota en sus filas, pero en el minuto 50, tras asociarse con Tella, Alejandro Grimaldo marcó el segundo con un remate dentro del área.
Tras el 2-0 Tuchel corrigió y volvió a su esquema habitual, enviando al campo a Thomas Müller y Joshua Kimmich, que habían empezado el partido en el banquillo.
Nada sirvió. Tampoco el ingreso posterior de Mahtys Tel y Eric Maxim Choupo Moting. El Bayern ni siquiera logró fabricar ocasiones claras y el Bayer Leverkusen estaba más cerca del tercero.
Ya en el tiempo de reposición llegó el tercero, marcado por Jeremie Frimpong con un remate a puerta vacía desde cerca de la mitad del campo cuando Manuel Neuer había decidido incorporarse al ataque.