Un incómodo y repulsivo se vivió en medio de la premiación de España tras imponerse en la final de la Copa del Mundo femenina, luego de derrotar a Inglaterra por la cuenta mínima y levantar el título por primera vez en su historia.
Sin embargo, en plena entrega de medallas, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, no encontró nada mejor que aprovecharse del momento de efusividad y besar en la boca a la jugadora Jennifer Hermoso, poniendo el punto negro de la jornada.
Pese a que algunos medios de comunicación españoles intentaron ‘blanquear’ la situación al comparar este beso con el de Iker Casillas y Sara Carbonero en el Mundial de Sudáfrica 2010, el incidente no pasó desapercibido.
En cuestión de segundos, el hecho generó un sinfín de reacciones en redes sociales, provocando un repudio transversal entre los hinchas del fútbol.