Esta semana, la Copa Libertadores le dio el puntapié inicial a la segunda ronda de sus fases previas, donde un sinfín de equipos buscan darlo todo para hacerse un lugar en el certamen más importante de Sudamérica a nivel de clubes. Sin embargo, la polémica no podía faltar.
Pese a que este tipo de instancias es una buena oportunidad para que hinchadas de distintos países puedan compartir, la hostilidad se tomó el encuentro entre Carabobo y Atlético Mineiro de Eduardo Vargas, luego de que un grupo de hinchas venezolanos cruzara todo límite.
En la llegada del plantel brasileño al Estadio Olímpico de la Universidad Central, este puñado de fanáticos esperó la presencia de los jugadores visitantes para gritarles insultos racistas, siendo “macaco” la palabra más escuchada.
Ante esta condenable actitud en Venezuela, el ‘Galo’ no dejó pasar la situación y utilizó sus redes sociales para exponer a los aficionados con un claro mensaje de repudio.
No obstante, el club brasileño no fue el único en tomar cartas en el asunto, ya que la Conmebol, a través de su cuenta oficial de Twitter, emitió un comunicado en contra del racismo.
“La CONMEBOL considera absolutamente inaceptable cualquier manifestación de racismo y otras formas de violencia en sus torneos. En mayo del 2022, el Consejo modificó el Código Disciplinario, aumentando las penas para actos discriminatorios. El racismo no tiene cabida en la fiesta del fútbol sudamericano. ¡Basta de racismo!”, recalcó la entidad, deslizando que Carabobo deberá prepararse para un fuerte castigo.