Subido en una racha de tres victorias seguidas o de cinco triunfos en sus últimos seis encuentros, el Manchester United ya acecha al City en la segunda plaza de la clasificación, lanzado por un gol de Casemiro, acomodado con otro tanto de Luke Shaw y ganador irrebatible con el 3-0 de Marcus Rashford ante el Bournemouth en Old Trafford.
En puestos de la Champions League, con los mismos puntos ya que el tercero, el Newcastle, a nueve todavía del liderato del Arsenal, el United de Ten Hag está en forma, mientras Cristiano Ronaldo ficha por el Al Nassr de Arabia Saudita, sin ningún efecto en el conjunto con el que comenzó la temporada y del que forzó su salida antes del Mundial de Qatar 2022.
No nota su ausencia el United, entre la reafirmación de su nuevo proyecto y la consolidación en el once de Casemiro, que marcó el 1-0 sobre el que su equipo construyó la victoria en el minuto 23, con un remate con la derecha en un formidable centro de falta de Christian Eriksen, otro magnífico jugador que refleja el buen momento de los Diablos Rojos.
Cierto que enfrente había un rival de la zona baja, con siete derrotas en las últimas ocho jornadas, con nada más un triunfo como visitante en este curso, con algún amago sobre la portería de David de Gea, tanto como que el United sólo ha perdido uno de sus últimos diez encuentros de la Premier. Y su eficacia es hoy una garantía.
Ya sin Van de Beek, en el once, lesionado al borde del descanso, sustituido por el hispano-argentino Alejandro Garnacho, el 2-0 fue un golazo de Luke Shaw. Él inició la acción en el lateral izquierdo y él la culminó en el otro área, previo paso por una precisa jugada colectiva con sus compañeros con la asistencia final de Garnacho.
Era el comienzo del segundo tiempo. La resolución aparente del partido, con alguna inquietud solventada por De Gea, antes del definitivo 3-0, la sentencia del choque: Bruno Fernandes asistió, Rashford marcó. El United apunta alto.