Los Miami Heat volvieron a asaltar el TD Garden de Boston este viernes y remontaron doce puntos de desventaja, liderados por Jimmy Butler, para ganar por 111-105 a los Celtics y tomar ventaja 2-0 en las finales de la Conferencia Este de la NBA, lo que les deja a dos triunfos de alcanzar las Finales como octavos cabezas de serie.
Los Heat ya no son sorpresa. Accedieron a los Playoffs pasando por el ‘play-in’, pero a medida que aumenta la presión, su nivel se dispara.
A partir de su líder absoluto, un Butler que firmó 27 puntos, ocho rebotes, seis asistencias y tres robos y que respondió en el campo a las provocaciones de Grant Williams, que le encaró en el cuarto período cuando los Celtics ganaban por nueve puntos.
La serie se desplaza ahora a Miami para los dos próximos capítulos. Los Heat nunca han perdido en casa en esta postemporada, en la que eliminaron a los Chicago Bulls en el ‘play-in’, a los Milwaukee Bucks, el mejor equipo del Este, y a los New York Knicks.
Butler es el líder de unos Heat que juegan como equipo, en el que Bam Adebayo rozó el triple doble con 22 puntos, 16 rebotes y nueve asistencias y un Gabe Vincent extraordinario saliendo del banquillo, con 25 puntos.
El equipo de Erik Spoelstra, que no puede contar con una pieza de gran valor como Tyler Herro, volvió a dejar en evidencia los límites de los Celtics, incapaces de gestionar sus ventajas en estos Playoffs.
Tras desperdiciar trece puntos de ventaja en el primer período, no supieron defender sus doce de margen este viernes y cayeron en una nueva noche agridulce de Jayson Tatum, que acabó con 34 puntos, trece puntos y ocho rebotes, pero que solo anotó desde la línea de libres en el cuarto período.
Su equipo no logró apoyarle lo suficiente, con Jaylen Brown que fue el segundo mejor con 16 puntos.
Los números hablan claro. Una franquicia que tomó ventaja 2-0 en una serie de Playoffs, avanzó 312 veces de 339 en la historia de la NBA.