Se trata Matheus Guimarães Montenegro, quien comenzó a jugar Fortnite desde los 10 años. Ahora, su habilidad en el videojuego le permitió ser becado en 28 universidades y cumplir su objetivo de estudiar y vivir en Estados Unidos.

El joven de 20 años se contactó con las universidades a través de una plataforma para la comunidad de jugadores de elite, donde se reúnen los deportistas electrónicos más destacados de Fortnite. Allí tuvo que pasar una serie de pruebas.

Metheus descubrió este método de ingreso a la universidad por casualidad, mientras navegaba por Instagram vio la historia de otro joven que había pasado el proceso con éxito. Fue él quien lo puso al día con la información para que comenzara a ponerse a prueba.

“Había quedado en 32 universidades por ser un atleta de Fortnite. Lo llamé por Instagram y me enseñó lo básico”, contó para el medio local Sónotícia Boa. Después de eso se puso manos a la obra.

¿Cómo fue el proceso de Matheus para ingresar a la universidad gracias a jugar Fortnite?

En primera instancia intentó ingresar a alguna tutoría que lo acompañara en el proceso, sin embargo, no tenía los recursos para costearla así que fue autodidacto. Después de prepararse ingresó a la plataforma, un chat de voz que permite contactar con universidades.

“Es una plataforma mucho más rápida para ponerse en contacto con la mayoría de las universidades con e-sports”, reconoció en la entrevista. Los requisitos escolares eran tener buenas calificaciones en la enseñanza media y haber participado en actividades extracurriculares.

Además, tuvo que presentar cartas de recomendación de sus profesores, ensayos y tener talento en Fortnite. Específicamente tuvo que participar en campeonatos online y enviar videos que demostraran sus mejores momentos de destreza en el videojuego.

Luego de cumplir cada paso tuvo un resultado exitosos, puesto que logró obtener becas de entre 50% y 75% en 28 universidades. Matheus se decidió por la carrera de informática, cuya beca le cubrirá más de la mitad del costo de la carrera, en la Oklahoma Christian University.

“Fue increíble lograr algo con lo que soñé toda mi vida. Estaba muy emocionado. Con cada aprobación que recibía, me estabilizaba más y más“, comentó. Además, contó que juega Fortnite alrededor de 4 horas al día y además estudia inglés constantemente para cuando se cambie de país.