“Tengo ganas de llorar”, dice Zhang Yuchen, de 14 años, que en plenas vacaciones de verano solo puede disfrutar dos horas por día de su videojuego favorito debido al endurecimiento de las reglas en China para luchar contra la adicción a las pantallas.

El gigante tecnológico Tencent, líder del mercado chino, impuso una nueva restricción a su título insignia, el ultrapopular “Honor of Kings” (Honor de reyes). Ahora, los menores de 18 años sólo podrán jugar dos horas al día, como máximo.

Algunos niños pueden pasar el día entero pegados a sus pantallas. Un fenómeno criticado desde hace mucho tiempo en China por sus consecuencias negativas: visión reducida, impacto en los resultados escolares, falta de actividad física o riesgo de adicción.

Una muestra del peso del mercado de los videojuegos en este país de 1.400 millones de habitantes es que generaron 17.000 millones de euros de volumen de negocios sólo en el primer semestre de 2021.

Las regulaciones ya prohibían a los menores jugar en línea entre las 10 de la noche y las 8 de la mañana, pero cuando a principios de agosto un artículo de un diario económico oficial calificó a los videojuegos como un “un opio mental”, el sector empezó a temer un nuevo endurecimiento regulatorio de las autoridades a las empresas digitales.

El artículo señalaba además a Tencent y a su popular juego “Honor of Kings”, un éxito en China con más de 100 millones de usuarios activos diarios.

De ahí que los inversores del mercado de valores se deshicieron de las acciones de los gigantes del sector (Tencent, NetEase, Bilibili …), lo que provocó la caída de los precios.

“Adictos”

Ante esta presión, el grupo, que ya imponía limitaciones al tiempo de juego a través del reconocimiento facial para que los menores de 18 años no jugaran en las noches, endureció aún más las reglas. Ahora, sólo podrán jugar a “Honor of Kings” una hora al día durante el período escolar y dos horas en las vacaciones. Una vez cumplido este lapso, el juego se bloquea.

Para muchos jóvenes es una estrategia excesiva. Para Li, de 17 años, que se negó a dar su apellido, es “angustiosa” la medida, pues cree que adolescentes de su edad, casi mayores de edad y por tanto más responsables, pueden limitar su tiempo de juego por su cuenta.

Sin embargo, algunos astutos encontraron la solución: “utilizando la cuenta de un adulto, juego de dos a tres horas al día y, por supuesto, a partir de las 10 de la noche”, ríe un jugador de 17 años que desea mantenerse en el anonimato.

Pero, ¿se justificaba la reacción frenética de los mercados por el artículo de la revista?

“Los inversores del mercado de valores reaccionaron de forma exagerada y eso desbocó a los medios”, dijo Ether Yin, analista de Trivium China.

“Desde 2018 el gobierno quiere evitar que los niños se vuelvan adictos a los juegos”, señala, y enfatiza que esta tendencia no es nueva, por lo que se espera que otras empresas de videojuegos creen sus propias restricciones en las próximas semanas.

Por ahora, las medidas sólo se aplican a este juego de Tencent, pero la mayoría de los padres agradecen las nuevas restricciones, aunque a algunos que les encantaba jugar con sus hijos también se han visto afectados.