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Pocos lanzamientos en el último tiempo habían generado tanta expectación como las consolas de nueva generación.
La primera en ver la luz fue la Xbox Series X/S, cuyo review puedes ver en este enlace, y hace sólo algunos días arribó oficialmente a nuestro país la PlayStation 5.
Luego de su anuncio en junio pasado, el hype por la sucesora de la PS4 no hizo más que aumentar, hasta que finalmente llegó a las estanterías de todo el mundo.
Y como no podía ser de otra forma, la PS5 arrasó en las diversas preventas dispuestas tanto en Japón como también Europa y América, incluyendo por supuesto a Chile.
Desde Sony nos facilitaron una unidad de PlayStation 5 para conocerla y probarla con mayor detalle, y así contarles a ustedes nuestras impresiones.
¿Cumplirá con las expectativas que hay en ella? A continuación te lo contaremos.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que la PS5 está disponible en dos versiones: la PlayStation 5 (que fue la que probé para esta reseña) y la PlayStation 5 Edición Digital, cuya única diferencia es que ésta última no trae lector de discos.
Una vez con la consola instalada en su soporte, que se logra fácilmente, notarás que estéticamente “futurista” con líneas orgánicas. Ojo, porque también puedes ocuparla horizontalmente, lo que es una buena jugada de Sony para así ver la zona que más nos acomode para instalarla. Con una mezcla entre el negro y blanco, bien puede parecer un bello y elegante elemento más en tu living.
En cuanto a sus dimensiones, es más bien grande (39 x 10,4 x 26 cm), superando en ese sentido de manera notoria a sus antecesoras, lo que a su vez se traduce en un peso considerable (4,5 kg). Como te estarás imaginando, no es una consola que sea fácil de manipular, por lo que lo mejor es instalarla en el lugar que consideres como el “definitivo” para evitar cargarla de sobremanera.
En la zona frontal tiene un puerto USB tipo C (Super-Speed USB 10 Gbps) y un puerto USB tipo A (Hi-Speed USB), mientras que por la zona trasera tiene dos puertos USB tipo A (Super-Speed USB 10 Gbps) además de un puerto Ethernet. Lo que me llamó la atención es la ausencia de la entrada para audio óptico. Un detalle llamativo y que deja en evidencia la preocupación por la estética, es que tanto la consola como el control DualSense tienen una superficie un tanto rugosa. Si observas con atención, verás que la textura está compuesta por círculos, cuadrados, cruces y triángulos, los clásicos símbolos de los mandos de PlayStation.
Ya al prender la consola notarás que el menú principal es un tanto diferente al de la PS4, con una disposición diferente de las opciones, lo que podría hacer que te demores algunos minutos en acostumbrarte. No obstante, en mi caso no fue algo tan complejo.
La consola viene con el demo Astro’s Playroom preinstalado, el cual fue desarrollado netamente para mostrar las bondades principalmente del control DualSense. Con un estilo que recuerda a los clásicos de plataforma, te hace sentir con extrema precisión las superficies por las que camina el personaje principal.
Es así como caminar por una plataforma dura no será lo mismo que hacerlo por la arena de una playa, dando una sensación de realismo pocas veces vistos. Esto también lo notarás al nadar, ya que el movimiento del mar también se hace sentir con el nuevo control.
Evidentemente es en este juego en donde más se nota esta capacidad de movimiento, no obstante en otros títulos como Spider Man: Miles Morales la respuesta es más bien simple. Lo que más me intriga es saber el provecho que le sacarán las desarrolladoras en los próximos juegos de la PS5.
Por su parte, el DualSense incluye un parlante que entrega una calidad de audio sumamente bien trabajado. Por momentos es como si realmente pequeñas criaturas gritaran desde el interior del mando. Esto, sumado a su micrófono incorporado, lo hacen un control que cumple totalmente.
Los tiempos de carga son uno de los cambios más notorios en relación a la PS4, los cuales disminuyeron drásticamente, lo que se agradece enormemente. Esto lo he podido observar en juegos como Demon’s Souls, y sin duda es un elementos clave en la experiencia del usuario. ¿Será una tendencia con los nuevos exclusivos de PS5? Todo apunta a que sí.
Además de los ya mencionados Spider Man: Miles Morales y Demon’s Souls, he probado además Sackboy: A Big Adventure, cuyos reviews estarán disponibles muy pronto. Los títulos se ven sumamente fluidos, con cinemáticas elaboradas y texturas definidas que llevan a un nuevo nivel los gráficos que podemos esperar de un juego.
Lo mejor de todo es que hay juegos que pueden correr a 120 FPS y aprovechando las bondades del sistema Ray Tracing, el cual logra una iluminación y reflejos en tiempo real. Ojo con los cristales y superficies reflectantes: probablemente estarás algunos segundos disfrutando del realismo.
Si consideramos que la mayoría de los juegos de PS4 pueden correr en la PS5, tendrás bastante tiempo para sacarle más provecho aún a excelentes títulos como Ghost Of Tsushima pero a 60 FPS, lo que es una delicia.
Si bien no quiero profundizar en detalles en cuanto a los gráficos en ciertos juegos (estamos preparando estos reviews para ahondar más en este aspecto), la diferencia entre la PS4 y la PS5 es evidente. Eso sí, para esto debes contar con un televisor adecuado -4K con HDR y una tasa de refresco de 120Hz- para sacar su máximo potencial. Hice la prueba de conectar la PS5 con un televisor sin 4K para verificar el cambio y es notorio. A su vez, una buena idea es contar con un buen sistema de audio con una correcta ecualización; no te arrepentirás.
Una de las dudas que tenía era en relación al sonido de la consola, y por el momento es mínimo. Tal como se había anunciado, pasa desapercibido. Por su parte, gracias a su nuevo sistema de refrigeración, no se calentó como pensé que lo haría. En la zona posterior noté un leve aumento, pero nada importante. Eso sí, habrá que esperar para ver cómo se comporta con títulos más exigentes.
¿Vale la pena la PS5? Definitivamente si. Si bien es cierto que no es una consola barata, nos da la oportunidad de llevar la experiencia de juego a un nuevo nivel: con gráficos sumamente bien logrados, tiempos de carga menores, un catálogo que abarcará todos los gustos y un control DualSense que para mí, es el mejor mando de una PlayStation.
Por todos estos argumentos, se abre un amplio abanico de posibilidades para las desarrolladoras. Si no alcanzaste a comprarla durante las preventas, perfectamente puedes esperar un poco, considerando que aún falta por ver el catálogo completo de juegos exclusivos.
La PlayStation 5 está disponible en Weplay, Microplay, Zmart, Ripley, Paris, Falabella, Hites y Sony Store a precios referenciales de $649.990 (PS5) y $499.990 (PS5 Edición Digital).
