- ¿Cómo conseguiste mi correo?
- De tu sitio. Es peligroso, cualquiera podría conseguirlo.
Luego llegaron sus correos, unos 80 por día y a toda hora. Su dirección era una serie aleatoria de números y letras, como spam. Una acosadora convicta me acosaba.
Este fragmento pertenece a la popular serie de Netflix “Bebé Reno”, la cual muestra un caso real de acoso, cómo impacta en la vida física y digital de una persona, así como sus consecuencias.
El acoso en Internet es un problema creciente que atenta contra la privacidad de las personas y, como Donny Dunn, el protagonista de esta historia, el 26% de los chilenos ha sido acosado en línea por alguien que acababan de conocer, según un reciente estudio de Kaspersky.
La investigación reveló que un 15% de los chilenos ha recibido correos electrónicos, SMS o mensajes no deseados a través de redes sociales de una persona con la que ha salido. Entre las acciones asociadas al acoso están las insinuaciones sexuales, amenazas o publicaciones de comentarios degradantes en redes sociales, como muestra la serie.
Lamentablemente, una vez que alguien tiene acceso a tu vida digital, también lo tiene a tu vida real, por lo que estas acciones pueden escalar con rapidez, involucrando hostigamiento físico a las víctimas e incluso a las personas cercanas a ellas. Por eso, es común que quienes sufren acoso experimenten problemas como enojo, baja autoestima, ansiedad o depresión, lo que puede poner en riesgo su salud física, mental y emocional.
“Los usuarios dejan su huella digital al compartir públicamente en Internet datos como su nombre, información de contacto, ubicación, lugar de trabajo, entre otros, lo que puede hacerlos más vulnerables al ciberacoso e incluso a que los riesgos del mundo virtual se trasladen al mundo físico”, comenta al respecto Judith Tapia, gerente de Producto para el Consumidor para México en Kaspersky.
“La mejor defensa contra esta amenaza es la prevención: cuidar qué información compartimos en línea, cuáles de nuestros datos son de acceso público y asegurarnos de saber con quién estamos interactuando fuera y detrás de la pantalla”.
Cuatro lecciones inspiradas en Bebé Reno, según Kaspersky:
● Reconsidera los datos personales que compartes. No completes del todo tu perfil o biografía en las redes sociales; por ejemplo, omite tu fecha de nacimiento o el nombre de tu empresa. Tampoco compartas nunca, en ningún foro, tu número de teléfono o la dirección de tu hogar. Procura utilizar datos de contacto (correo y teléfono) exclusivos para tu trabajo y otros para temas personales.
● Evita a los desconocidos en redes sociales. Haz que tus perfiles sean privados y revisa quién puede ver tus publicaciones. Revisa tus configuraciones de seguridad para evitar que cualquier persona tenga acceso a tus fotos, ubicación, pasatiempos o círculo de amigos y familia. Si comienzas a interactuar con alguien, establece límites sobre el tipo de información que compartes y solo revela temas personales a medida que la confianza se desarrolle.
● Resguarda tus dispositivos. Emplea una solución de seguridad confiable, que ofrece protección contra el software malicioso, una VPN rápida e ilimitada, y además puede detectar amenazas en cualquier sitio.
● Si eres víctima de acoso, junta las pruebas y denuncia. No sigas el juego del acosador, guarda todos sus mails, publicaciones, llamadas y cualquier otro tipo de interacción en la que te haya amenazado o molestado. Recopilar toda la información con detalle te ayudará en el acercamiento con las autoridades correspondientes.