El teléfono celular de un niño español de 12 años explotó, sin razón aparente, en medio de la noche, mientras toda la familia Pardo dormía en su residencia, ubicada en la ciudad de Granada. Afortunadamente el móvil, de marca Samsung, se estaba cargando en la sala de estar.
Según consigna el medio español ABC, el aparato explotó el pasado domingo 26 de agosto alrededor de las cinco de la madrugada. Los moradores indicaron que escucharon un ruido similar a la caída de un objeto pesado sobre el suelo.
César Pardo, el padre de familia, indicó que se percató de la gravedad de la situación luego de observar que desde el living de la casa provenía un destello de luz. Tras revisar, vio que el sofá había comenzado a incendiarse, por lo que procedió a apagar el fuego con cojines y posteriormente con agua.
El incidente será revisado por peritos en el lugar, quienes determinarán si la falla se debió a algún problema relacionado con el teléfono celular o con la instalación eléctrica.
“Estamos esperando a que venga el perito. Nos han dicho que no movamos ni limpiemos nada. Que dejemos todo como quedó después de que estallara el teléfono. Y eso hemos hecho”, indicó Pardo.
El afectado agregó que ya contactó a Samsung a través de redes sociales, con el fin de que la compañía responda por el daño que ocasionó la explosión del aparato a su hogar.
Cada año se producen millones de baterías de ión de litio en la industria de los dispositivos móviles, y la proporción de las que son defectuosas es muy pequeña.
En el caso de Samsung, el responsable de la división de telefonía del grupo había asegurado, en septiembre de 2016, que el porcentaje de aparatos defectuosos era de 24 por cada millón.
Por esto motivo, la compañìa se vio forzada a ordenar un llamado a revisión a escala mundial de 2,5 millones de unidades del Note 7, después de que algunos aparatos ardieran al estallar la batería durante la carga.