Elon Musk, quien compró la red social Twitter en abril de 2022, aseguró a través de sus redes sociales que ya no se desempeñará como CEO de Twitter, debido a que encontró a una persona adecuada para el cargo.
Musk, que desde su compra ha encabezado las decisiones de la red social, aseguró que la nueva gerente general será una mujer que ingresará al rol “en las próximas seis semanas”.
Por su parte, apuntó que “mi rol pasará a ser presidente ejecutivo, CTO, supervisor de producción, software y sysops”.
En noviembre de 2022, Musk aseguró en un tribunal de Delaware que no quería ser consejero delegado de ninguna empresa. Mientras testificaba, dijo: “Espero reducir mi tiempo en Twitter y encontrar a otra persona que dirija Twitter con el tiempo”.
Así, en diciembre de 2022, el multimillonario de Tesla aseguró que planeaba encontrar un nuevo consejero delegado para Twitter, con sede en San Francisco.
Esto, luego de que a pocas semanas de comprar la plataforma por 44 mil millones de dólares, preguntara a los usuarios si debía seguir como director ejecutivo: en doce horas votaron 17 millones de usuarios y un 57 % le pidió abandonar el puesto.
Como respuesta a dicha encuesta, aseguró en un tuit que “dimitiré como CEO tan pronto como encuentre a alguien lo suficientemente tonto como para aceptar el trabajo”.
En febrero, dijo en una conferencia que preveía encontrar un CEO para Twitter “probablemente hacia finales de este año”.
Asimismo, la administración de Musk en la red social no ha estado libre de polémicas. Entre ellas, se encuentra el aplicar un plan de pago en la red social donde los usuarios pagan para tener algunos beneficios o también cambiar por varios días el logo de Twitter por el de la criptomoneda Dogecoin.
Dichas actividades hicieron que los anunciantes huyan en masa de la red social fundada en 2006, lo que causó que los ingresos por publicidad cayeran recientemente hasta en un 75%, según The Washington Post.