El inicio de este 2021 ha sido bastante turbulento para WhatsApp. Desde el jueves pasado la plataforma se ha visto envuelta en toda una polémica tras haber solicitado a sus dos mil millones de suscriptores aceptar nuevas condiciones de uso.
De esta manera, el grupo busca rentabilizar su plataforma permitiendo a los anunciantes contactar a sus clientes a través de WhatsApp, e inclusive vender sus productos de manera directa, como ya ocurre en India.
Aquellos usuarios que rechacen estas nuevas políticas de privacidad, no podrán seguir usando la app a partir del 8 de febrero próximo.
Como era de esperar, esto ha generado bastante revuelo entre los usuarios, provocando incluso que muchos decidieran migrar hacia Telegram.
Por lo mismo, desde WhatsApp se han referido en sus redes sociales al cambio en sus condiciones, para así aclarar algunas dudas.
“Queremos abordar algunos rumores y ser 100% claros, continuamos protegiendo tus mensajes privados con cifrado de extremo a extremo”, comenzó señalando la app.
Mediante una infografía, la compañía aseguró que “no puede ver tus mensajes privados ni escuchar tus llamadas ni tampoco Facebook”, agregando que tampoco “mantiene registros de a quién estás enviando mensajes o llamando”.
We want to address some rumors and be 100% clear we continue to protect your private messages with end-to-end encryption. pic.twitter.com/6qDnzQ98MP
— WhatsApp (@WhatsApp) January 12, 2021
“No puede ver tu ubicación compartida y tampoco Facebook”, puntualizaron, añadiendo a su vez que “no comparte tus contactos con Facebook”.
En otro tuit, WhatsApp indicó: “La actualización de nuestra política de privacidad no afecta la privacidad de tus mensajes con amigos o familiares. Obten más información sobre cómo protegemos tu privacidad y lo que NO compartimos con Facebook”, compartiendo un enlace de su nueva sección de preguntas y respuestas.
Cabe destacar que la Comisión Nacional de Informática y Libertades (CNIL), regulación francés de internet, recordó a la agencia Agence France-Presse que desde 2017 se había iniciado una investigación sobre las consecuencias de la compra de Whatsapp por Facebook por 22.000 millones de dólares en 2014, incluidas las condiciones de transferencia de datos.