La aplicación de videos cortos TikTok y el gobierno de Donald Trump no han llegado a un acuerdo sobre la venta de las operaciones de la compañía en Estados Unidos el viernes por la noche, pocas horas entes de la fecha límite para lograrlo, señaló una fuente cercana al caso.
El Comité de Inversión Extranjera había dado a la empresa matriz de TikTok, ByteDance, con sede en China, hasta la medianoche de este viernes para alcanzar un acuerdo aceptable que conduzca a que los activos de TikTok pasen a manos estadounidenses.
Las conversaciones entre TikTok y los negociadores del gobierno continuarán incluso después de que pase la fecha límite, y los usuarios locales de la popular aplicación podrán mantenerla en sus teléfonos inteligentes, dijo la fuente.
Una larga disputa
El futuro de la aplicación de videos está en el aire en Estados Unidos desde que la administración de Trump afirmó que China podría utilizar TikTok para espiar a sus usuarios.
Trump firmó un decreto el 14 de agosto en el que obligó a ByteDance a ceder sus actividades estadounidenses en un plazo de 90 días, por representar una amenaza para “la seguridad nacional de Estados Unidos”.
Washington exige que la compañía china venda sus activos en Estados Unidos a empresas o inversores locales.
Según documentos judiciales consultados el 13 de noviembre, la red social, que desmiente las acusaciones de espionaje, propuso crear una nueva compañía para concentrar en ella sus actividades estadounidenses.
Esa empresa estaría integrada por el grupo informático Oracle, como socio tecnológico, el gigante de la distribución Walmart, como aliado comercial, y los inversores estadounidenses de ByteDance.
Trump había dado su acuerdo en septiembre a una primera oferta de ByteDance, que preveía que Oracle y Walmart adquirieran el 20% de las partes de una compañía llamada TikTok Global, encargada de las actividades mundiales de la plataforma, con sede en Estados Unidos.
Pero pronto surgieron reticencias, y varios allegados del presidente estadounidense consideraron que, con esa propuesta, ByteDance seguiría teniendo el control de la nueva compañía.
TikTok y sus aliados lanzaron entonces una ofensiva judicial para resistir a las presiones del gobierno estadounidense.
Cualquier acuerdo cerrado entre ByteDance y Washington tendrá que ser aprobado por Pekín, que impone restricciones a las exportaciones de tecnologías creadas por empresas chinas.
El famoso algoritmo de TikTok, que permite mostrar los contenidos con mayores posibilidades de interesar a los usuarios en función de sus gustos, suscita mucho interés, y China quiere evitar que caiga en manos estadounidenses.