Freepik

Descubren que secuelas del consumo de tabaco permanecen en los huesos cientos de años después de morir

Publicado por Constanza Bello Caipillán
La información es de Deutsche Welle

24 octubre 2024 | 07:00

Un estudio reciente de la Universidad de Leicester ha revelado que el consumo de tabaco deja un rastro metabólico detectable en los huesos, incluso después de siglos de la muerte de una persona.

La investigación, publicada en Science Advances -consignada por DW-, analizó restos óseos que datan desde el siglo XII hasta el XIX, logrando identificar diferencias significativas entre los huesos de fumadores y no fumadores. Este hallazgo podría ofrecer nueva información sobre la salud de las poblaciones antiguas.

El equipo, en el marco del proyecto “Tabaco, Salud e Historia”, examinó los restos óseos de 323 individuos de dos sitios en Reino Unido: el cementerio de St James’s Garden en Londres y un cementerio rural en Barton-upon-Humber, Lincolnshire.

Este último fue clave en el estudio, ya que incluía restos de personas que vivieron tanto antes como después de la introducción del tabaco en Europa en el siglo XVI, proporcionando una línea temporal única para el análisis.

Liderados por la Dra. Sarah Inskip, los investigadores utilizaron técnicas avanzadas, como la cromatografía líquida y la espectrometría de masas de alta resolución, para identificar 45 características moleculares en la capa externa de los huesos, conocidas como hueso cortical.Estas características permitieron distinguir a los fumadores de los no fumadores.

“Nuestra investigación demuestra que existen diferencias significativas en las características moleculares contenidas en los huesos de los antiguos consumidores de tabaco y de los no consumidores“, explicó la Dra. Inskip en un comunicado de la Universidad de Leicester.

Además, el estudio destacó que estas diferencias permanecen en los huesos durante siglos, lo que es especialmente valioso para la bioarqueología.

Esto permite identificar a antiguos fumadores incluso cuando no se encuentran señales dentales típicas, como desgaste o manchas por el uso de pipa. Este hallazgo ofrece una nueva vía para comprender cómo el tabaco afectó a las poblaciones del pasado.

Los investigadores ahora buscan profundizar en cómo surgen estas diferencias óseas y por qué el consumo de tabaco se relaciona con ciertos trastornos musculoesqueléticos y dentales. Este conocimiento podría aportar una mayor comprensión sobre los efectos a largo plazo del tabaco en el cuerpo humano.