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José Maza, Doctor en Astronomía, destaca la importancia de la participación chilena en este acuerdo, que permitirá al país contribuir en reuniones y aprender a fondo sobre la exploración espacial. A pesar de la baja inversión en ciencia en Chile, Maza enfatiza que cada país aporta según sus posibilidades. La próxima llegada del hombre a la Luna entre 2025 y 2027 marcará un hito en la exploración espacial, con la construcción de bases humanas para investigaciones científicas. La cooperación internacional pacífica es clave en este proyecto, que plantea desafíos como la explotación de recursos lunares.

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Este martes se conoció que Chile se sumará a los Acuerdos de Artemis, un tratado internacional que aboga por regresar a la Luna de manera pacífica, segura y con cooperación entre países.

A la fecha, más de 40 naciones ya firmaron los acuerdos, entre ellos varios países de Sudamérica como México, Colombia, Ecuador, Uruguay, Argentina y Perú.

En conversación con BiobioChile, José Maza, Doctor en Astronomía y Premio Nacional de Ciencias Exactas (1999), comentó esta noticia y analizó lo que significa la participación del país en este importante convenio.

“Lo encuentro extraordinario. Chile se está empezando a dar cuenta que esos son los foros donde tenemos que estar. (…) Necesitamos pensar más, invertir más y ser parte de estas cosas internacionales”, expresó.

El rol de Chile en los Acuerdos de Artemis

Con la firma de Chile en los Acuerdos de Artemis se abre un mundo de posibilidades en lo que respecta a tecnología, conocimientos y ciencia internacional. “Significa que algunos técnicos chilenos podrán ir a reuniones y podrán participar“, explicó el astrónomo.

Esto conlleva una inversión, aunque de por sí la cifra que se invierte en ciencia a nivel país es bastante baja. De acuerdo con el Ministerio de Ciencia, del Producto Interno Bruto (PIB) solo se invierte un 0,39% en esta materia.

Sin embargo, según explica Maza, en iniciativas como los Acuerdos de Artemis, cada país aporta lo que puede en relación con su propio capital.

“En estos consorcios, los distintos miembros contribuyen con dinero en proporción con su PIB. Entonces, claro, si Estados Unidos pone mil millones, nadie espera que Chile ponga mil. Chile a lo mejor pone 10 o pone 5, pero pone algo y está ahí. Realmente si no invertimos en ciencia y tecnología, en investigación y desarrollo, nunca vamos a ser un país desarrollado“, ejemplificó.

En esta línea, reflexionó que “estar en un lugar con gente que sabe mucho más que uno, a uno solo le puede traer beneficios, no hay ningún desperdicio en eso. (…) Si Chile entra en el proyecto Artemisa, va a entrar en un tono muy menor, una cosa chiquitita, pero vamos a poder estar en reuniones, vamos a poder ver cómo funciona”.

Además, criticó: “es extraordinario, porque si no, la otra alternativa es hacerse los tontos. Chile lleva 200 años haciéndose los tontos, ‘no, que lo hagan los demás, nosotros no, que lo hagan los alemanes, que lo hagan los japoneses’. Bueno ¿y por qué no nosotros? Cuando vamos a aprender, si no entramos en esto”.

Recordemos que, la próxima llegada del hombre a la Luna programada para esta década (2025-2027) marcará un antes y un después en los viajes espaciales, ya que la NASA y sus alianzas planean eventualmente construir bases humanas para hacer ciencia directamente en el satélite.

En este sentido, se espera una cooperación internacional pacífica frente a desafíos como explotar recursos en la Luna y los riesgos que aquello implica. Además, estos objetivos se deberán cumplir con responsabilidad, según piden los acuerdos.

“Yo lo creo muy importante, porque es declarar que nos importa, nosotros somos parte de la comunidad astronómica mundial. Y si queremos hacer una exploración, ir a la Luna o a Marte, bueno, Chile que aporte lo que pueda y que aprendamos todo lo que podamos aprender”, añadió Maza.

Por el momento, es muy temprano para decir que los chilenos irán a la Luna, de hecho, los astronautas que existen en el país son contados con una mano y solo operan en calidad de análogos, es decir, en simulaciones desde la Tierra.

Sin embargo, este sería un primer paso para ir más allá: “Yo creo que Chile tiene que aportar, somos una potencia en términos de la calidad de los cielos, los mejores observatorios del mundo, norteamericanos, europeos, japoneses, de todo estilo están en Chile. Entonces la exploración espacial también es algo que nos debería tocar muy cerca”, concluyó el astrónomo.