La divulgadora científica Teresa “Tere” Paneque se convirtió en la primera chilena en adjudicarse tres de las becas de investigación de más alto prestigio en el campo de la astronomía. Por ello, se vio obligada a escoger.
A sus 26 años, la también investigadora, escritora e influencer logró asegurar la NASA Hubble Fellowship, la Jansky Fellowship y la 51 Pegasi b Fellowship, consideradas como las tres becas de postdoctorado más importantes en astronomía en Estados Unidos.
Paneque, egresada del magíster en ciencias mención astronomía de la Universidad de Chile, optó finalmente por la 51 Pegasi b Fellowship, la cual describió como su “beca soñada”, convirtiéndose así en la primera chilena en unirse a este programa de la Fundación Heising-Simons.
Además, también obtuvo una beca interna de la Sociedad de Fellows de la Universidad de Michigan, siendo éste uno de los motivos por los que escogió dicha beca, dado que le permitía convalidar ambos financiamientos.
Diez años de astronomía de clase mundial
Su trayectoria comenzó hace 10 años en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, cuando a los 16 años inició su formación universitaria con el sueño de convertirse en astrónoma. Tere Paneque recuerda que en aquel entonces no tenía una imagen clara de lo que implicaba la disciplina, pero su pasión por la física y su curiosidad por el universo la llevaron a seguir este camino.
El logro de obtener estas tres becas prestigiosas es un hito destacado en su carrera y resalta las oportunidades y visibilidad que pueden tener los investigadores formados en Chile en etapas avanzadas de sus carreras. La beca 51 Pegasi b Fellowship, en honor al primer exoplaneta descubierto en 1995, financia específicamente a investigadores en áreas de las ciencias planetarias, y Paneque la eligió por su flexibilidad y la posibilidad de combinarla con su posición en la Universidad de Michigan.
Paneque, quien también es embajadora de UNICEF en Chile, financiará así su investigación sobre condiciones químicas en entornos de formación planetaria en la Universidad de Michigan durante los próximos cinco años. Su objetivo es realizar análisis sistemáticos de sus hallazgos para proyectar avances en el entendimiento de los procesos que dan origen a los planetas.
Ante este logro, Paneque espera que su historia inspire a más personas, especialmente a niñas, niños y mujeres, a seguir carreras en las ciencias y particularmente en la astronomía. Destaca el papel de mentoras como la profesora Laura Pérez, quien ha sido fundamental en su trayectoria.
“Tenemos muchas profesoras y mentoras de las cuales podemos aprender y en quienes nos podemos inspirar. La gatillante de mi ruta astronómica es la profesora Laura Pérez, haber podido trabajar con ella durante mi magíster en la Universidad de Chile, haber aprendido de ella no solo a nivel técnico y científico, sino que también de ella como persona y como mujer en la ciencia. Siento que he podido estar en lugares donde mis mentoras han confiado en mí y me han enseñado a sacar lo mejor de mis capacidades combinado con todo lo que ellas me han enseñado”, manifestó según la citó un comunicado de la Universidad de Chile.
Tras conocer la noticia, Laura Pérez, profesora del Departamento de Astronomía de la Universidad de Chile, expresó su alegría de que a Tere Paneque “le ofrecieron las becas de postdoctorado más prestigiosas que existen en Astronomía. La competencia es brutal en la selección, con cientos de postulantes a nivel mundial. Esto demuestra que la ciencia que está haciendo Teresa es relevante y de excelencia a nivel mundial”.
Paneque ve esta nueva etapa como una oportunidad para combinar sus aprendizajes de distintas comunidades astronómicas y espera poder traer ese conocimiento de vuelta al país. Su compromiso con la ciencia y el entendimiento de nuestros orígenes en el universo la guiará en los próximos años hacia nuevos hallazgos y contribuciones significativas en el campo de la astronomía.
Teresa destaca, además, que “Chile es un país desde el cual se desarrolla ciencia de primer nivel y cuyas investigaciones tienen repercusiones internacionales, y tenemos el privilegio de nuestro cielo, que es un laboratorio natural, y de toda la tecnología que se ha instalado en el norte del país”.