La tarde/noche del martes 26 de marzo, un extraño fenómeno se divisó en los cielos de algunos lugares de Chile. Usuarios en X (Twitter) postearon videos y reportaron la aparición de un supuesto “ovni” que dejó una especie de estela en el firmamento.
El avistamiento causó una serie de reacciones y algunos usuarios incluso apostaron a que se trataría de la aparición del Pons-Brooks o “Cometa Diablo”, que pasará cerca de la Tierra en las próximas semanas, pero en realidad tiene otra explicación.
¿No era un ovni?
Según pudo comprobar la Red Geocientífica de Chile, no era un ovni, ni un cometa, era un cohete Long March que fue lanzado desde China el martes para poner en órbita un satélite.
“Fue enviado desde China hacia la atmósfera a eso de las 19:51 hrs (horario en Chile)”, explicó el organismo en la misma red social.
Recordemos que, si bien los cohetes despegan en vertical, cuando alcanzan la altura y velocidad necesaria se inclinan para poder atravesar la atmósfera y alcanzar la órbita de la Tierra, y para orbitarla, vuelan a su alrededor.
Asimismo, la Red Geocientífica de Chile explicó que la estela que dejó el cohete, fue “producto de la quema del combustible que se produce como efecto del lanzamiento, la cual puede extenderse por cientos de kilómetros y ser vista bajo condiciones favorables, como la baja altura y la oscuridad de la noche”.
De acuerdo con los registros en redes sociales, el cohete chino fue visto en varios lugares de Chile de sur a norte, como Villarrica, Chillán, Marchigüe, Valle del Elqui, San Pedro de Atacama, Vallenar entre otros.
Acá puedes ver el lanzamiento del cohete Long March, que despegó a las 22:51 UTC (19:51 hora de Chile) desde Taiyuan, China, para poner en órbita el satélite Yunhai 3-02.