Años de investigación en un lecho de huesos de cinco triceratops en Wyoming muestran que vivieron y murieron como un grupo, tal y como aparecen en la saga Jurassic Park de Steven Spielberg.
Hasta este descubrimiento, el registro fósil de este famoso dinosaurio con tres cuernos y un gran volante en el cuello apuntaba a que se trataba de una especie solitaria.
El equipo del Centro de Biodiversidad Naturalis en los Países Bajos ha estado diez años trabajando en una excavación que ha desenterrado 1.200 huesos y fragmentos de huesos de al menos cinco individuos, que vivieron hace 67 millones de años.
Un equipo de paleontólogos y técnicos profesionales y voluntarios pasó años sacándolos de la cantera.
“El material óseo es de muy buena calidad”, reflexiona el paleontólogo de la Universidad de Utrecht Jimmy De Rooij, que participó en el estudio. “Esto nos permitió demostrar que, por ejemplo, estos triceratops crecían muy lentamente”.
Los detalles del lecho de huesos indican que los cinco dinosaurios murieron juntos, posiblemente atrapados en un pantano. Se encuentran en una fina capa de roca, sin huesos de otras especies”, explica en un comunicado.
La investigación sobre las propiedades físicas y químicas de los cientos de dientes de triceratops habla de una existencia migratoria, que era la misma para los cinco dinosaurios. En otras palabras: esta especie de dinosaurio formó equipo, al menos ocasionalmente.
“Y eso, por supuesto, lleva a todo tipo de nuevas preguntas”, dice De Rooij: “¿Cómo de complejo era exactamente este comportamiento social?”.