El pasado 8 de enero, Estados Unidos lanzó Peregrine 1, su primera misión privada a la Luna, la cual se esperaba alunizaría en febrero, siendo el regreso del país a la superficie lunar tras más de 50 años de su último alunizaje.
Sin embargo, una falla de combustible hizo que el cohete espacial que transportaba al módulo Peregrine, de la NASA, no pudiera continuar su viaje al satélite.
Inicialmente, la compañía Astrobotic, quienes desarrollaron el módulo de aterrizaje, informaron que intentarían hacer que el cohete se acercara la mayor distancia posible a la Luna, pero tras varios esfuerzos no fue posible.
Ahora, confirmaron que finalmente la nave espacial caerá a la Tierra en unos días. “Nuestros esfuerzos de análisis han sido desafiantes debido a la fuga de propulsor , que ha agregado incertidumbre a las predicciones de la trayectoria del vehículo”, escribió Astrobotic en X (Twitter).
La misión Peregrine 1 se quemará en la atmósfera
El cohete que transporta al módulo Peregrine y toda la carga útil que la NASA estaba enviando a la Luna, se precipitara hacia la Tierra, chocará con la atmósfera, donde se quemará y sus restos menores caerán posiblemente en el mar.
“Nuestra última evaluación ahora muestra que la nave espacial está en camino hacia la Tierra, donde probablemente se quemará en la atmósfera“, señaló la compañía.
En la última actualización del estado de la misión Peregrine 1, Astrobotic informó que la nave se encuentra a unos 350.000 kilómetros de la Tierra.
Además, la NASA continúa rastreando la nave para conocer su trayectoria final, donde el vehículo finalmente se quemará. Por el momento, se desconoce en cuantos días más el cohete se precipitara hacia la Tierra.
En la misma línea, compartieron una de las últimas imágenes del espacio tomada por una de las cámaras del módulo Peregrine antes de que se desintegre en la atmósfera.