Los pulpos mostraron conductas cerebrales activas que podrían indicar que sueñan mientras duermen, igual que los humanos.
Un nuevo estudio en torno a la actividad cerebral de los pulpos podría indicar que estos animales marinos sueñan, al igual que los humanos u otros vertebrados.
Un equipo de científicos del Okinawa Institute of Science and Technology (OIST) estudiaron la actividad neuronal en pulpos mientras estos dormían y descubrieron ciertos patrones que les permitieron indagar sobre si los pulpos en realidad sueñan.
Esto nunca se ha comprobado del todo, puesto que el cerebro de estos animales y su sistema nervioso, es muy diferente a de los vertebrados. Pero ahora, los expertos dicen haber confirmado la existencia de “estados de sueño alternos”.
¿Por qué se cree que los pulpos sueñan?
Para el estudio, se analizaron los cambios de coloración en la piel de los pulpos y su actividad neuronal mientras dormían y determinaron la existencia de 2 estados de sueño. El más activo, mostró actividad neuronal similar a cuando están despiertos, lo que podría indicar que sueñan.
“Mientras duermen, muchos grupos de vertebrados alternan entre al menos dos etapas del sueño: movimiento ocular rápido y sueño de ondas lentas”, explica el paper publicado en la revista Nature.
“El sueño ‘tranquilo’ en los pulpos se ve interrumpido rítmicamente por episodios de aproximadamente 60 segundos de movimientos corporales pronunciados y cambios rápidos en el patrón y la textura de la piel”, agregan.
A partir de ello, postulan que estos episodios de sueño más activos también se encuentran en pulpos y “son rápidamente reversibles y vienen con un mayor umbral de excitación”.
De hecho, un video publicado en 2020, muestra estos comportamientos.
La actividad neuronal de los pulpos y la evolución del sueño
Esta sería una evidencia más clara de que los pulpos estarían soñando, enfatizan los expertos. Además, conocer más sobre su actividad neuronal aportará información sobre la evolución y funciones del sueño.
“El hecho de que el sueño en dos etapas haya evolucionado de forma independiente en criaturas lejanamente relacionadas, como los pulpos, que tienen estructuras cerebrales grandes, pero completamente diferentes a las de los vertebrados, sugiere que poseer una etapa activa, similar a la de la vigilia, puede ser una característica general de la cognición compleja“, explica para Science Alert el físico estadístico Leenoy Meshulam, uno de los autores del estudio.
Y es que la estructura neuronal de los pulpos y otros invertebrados marinos es bastante diferente a la de los vertebrados, pero similar a los humanos. Incluso han mostrado signos de inteligencia y habilidades para resolver problemas.