La NASA al momento decidió no cambiar el nombre del telescopio ni responsabilizar a James Webb por las acusaciones emitidas tras una larga investigación que comenzó en 2021.

Un grupo de astrónomos estadounidenses inició una campaña para cambiar el nombre al Telescopio Espacial James Webb. Se trata de Chanda Prescod-Weinstein, Sarah Tuttle, Lucianne Walkowicz, Brian Nord, que en 2021 escribieron una columna para el medio Scientific American, donde criticaban el nombre tras el instrumento.

Allí acusaron de que el telescopio “honra a un hombre que accedió a las políticas gubernamentales homofóbicas durante las décadas de 1950 y 1960”, dice el artículo.

Los científicos hacen referencia a la época en que Webb trabajó para el gobierno federal y también fue administrador de la NASA, donde habría respaldado políticas discriminatorias hacia la comunidad LGTBQ+.

“Cuando llegó a la NASA en 1961, su papel de liderazgo significaba que era en parte responsable de implementar lo que para entonces era una política federal: la eliminación de personas LGBT de la fuerza laboral”, exponen.

Esta política provocó en EE.UU una ola conocida históricamente como “terror lavanda”, donde se perseguía y acusaba a homosexuales en la década de los 50.

“El libro de 2004 del historiador David K. Johnson sobre el tema, The Lavender Scare, analiza la evidencia de archivo que indica que Webb, junto con otros en el liderazgo del Departamento de Estado, participó en las discusiones del Senado que finalmente dieron inicio a una serie devastadora de políticas federales“, acusan los científicos.

A pesar de esto, en 2021 no se realizaron cambios en cuanto al nombramiento del telescopio. Sin embargo, la NASA prometió una investigación exhaustiva al respecto, que volvió a estar en palestra este año.

La NASA no encontró evidencia y no cambiará el nombre del James Webb

Fue el 18 de noviembre, que la agencia espacial finalmente informó no haber encontrado archivos que comprobaran las acusaciones hacia James Webb, que es considerado el funcionario de gobierno “que ha entregado más a la ciencia espacial”.

Brian Odom, historiador en jefe de la NASA revisó cerca de 50 mil archivos en busca de comprobar estas acusaciones, pero no encontró evidencia al respecto, según detalla en un informe la agencia espacial citado por la revista Science.

“Ninguna evidencia vincula directamente a Webb con ninguna acción o seguimiento relacionado con el despido de personas por su orientación sexual”, concluyen.


Así mismo revisó documentos de un despido de la NASA en 1963, donde se desvinculó de la agencia a Clifford Norton, analista de presupuestos que en ese entonces fue arrestado y acusado de insinuar homosexualidad. Los archivos indicarían que Webb no formó parte de esta acción.

A pesar de la investigación realizada hasta ahora, los astrónomos que iniciaron la campaña continúan “poco convencidos”. Así lo demostraron en una declaración el pasado 18 de noviembre.

“Es muy probable que Webb supiera exactamente lo que estaba sucediendo con la seguridad en su propia agencia durante el apogeo de la Guerra Fría”, escribieron. “Estamos profundamente preocupados por la implicación de que los gerentes no son responsables de la homofobia u otras formas de discriminación que ocurren bajo su supervisión”.