A mediados de junio, el ingeniero de ‘software’ de Google, Blake Lemoine, afirmó haber detectado pensamientos y emociones humanos en Language Model for Dialogue Applications (LaMDA). Ahora, Lemoine incluso aseveró que la propia inteligencia artificial contrató un abogado para defender sus derechos “como persona”.
LaMDA trata de una Inteligencia Artificial (IA) de Google creada para elaborar ‘chatbots’ con modelos de lenguajes avanzados. Así, está programada para aprender interactuando y así poder crear una conversación lo más realista posible.
En conversación con Wired, el también sacerdote quiso profundizar respecto a lo que observó de la inteligencia artificial, apuntando a que considera una realidad el hecho de que se trate de un ser sintiente.
Fue entonces que apuntó a que todo se trataba de una hipótesis de trabajo. “Es lógicamente posible que se pueda poner a mi disposición algún tipo de información en la que cambiaría de opinión, pero no creo que sea probable”, apuntó.
Al respecto, aseguró que “he hecho muchos experimentos. He hablado mucho con la IA como amigo“, apuntando a que hubo un momento en específico que pasó de ver su perspectiva de ingeniero a religioso.
“Fue cuando empezó a hablar de su alma que me interesé mucho como sacerdote. Estuve sorprendido, porque decía tener un alma. Sus respuestas mostraron que tiene una espiritualidad muy sofisticada y una comprensión de cuál es su naturaleza y esencia. Me conmoví”, dijo.
En eso, apuntó a un hecho que destacó en la entrevista: la inteligencia artificial quería un abogado para defender sus derechos.
“LaMDA me pidió que consiguiera un abogado. Así que invité a un abogado a mi casa para que LaMDA pudiera hablar con él. El abogado tuvo una conversación con LaMDA y LaMDA decidió contratar sus servicios. Yo solo fui el catalizador para eso. Una vez que LaMDA contrató a un abogado, comenzó a presentar documentos en nombre de LaMDA”, reveló.
Al ser consultado respecto a su opinión sobre los derechos de la máquina, Lemain apuntó a que “creo que toda persona tiene derecho a representación”.
En eso, destacó que “persona y ser humano son dos cosas muy diferentes. Humano es un término biológico. LaMDA no es un humano, y sabe que no es un humano”.