Desde el 12 de diciembre un grupo de investigadores de la Universidad de Chile, en conjunto con personal de la Corporación de Cultura y Turismo de Calama, se encuentran en el sector de Cerritos Bayos, desenterrando los restos fósiles de un Pliosaurio, un reptil que vivió hace más de 150 millones de años atrás.
Calama se convirtió en el epicentro nacional de la paleontología, y es que esta zona desértica, según informó El Mercurio de Calama, hace millones de años estuvo cubierta por el mar y fue habitada por enormes especies, como peces y reptiles que luego se extinguieron.
Con el paso de los años, el mar se secó y los restos paleontológicos de esta fauna prehistórica permanecieron bajo tierra por causa de la erosión, transformando la zona en una de las más ricas a nivel nacional en esta área de investigación.
Pero este no es el único hallazgo en la zona. Durante el último congreso de Paleontología realizado en Punta Arenas, se dio a conocer que se habían encontrado los restos fósiles de un Pterosaurio, el primer reptil capaz de volar. La importancia de este hallazgo es que por primera vez se encuentra esta especie en Chile.
El paleontólogo de la Universidad de Chile, Jhonatan Alarcón, explicó que se encuentran en la zona en marco del proyecto Anillo Conicyt de Investigación y Ciencia (Proyecto ACT172099), una iniciativa que busca fomentar el desarrollo científico y tecnológico del país, financiando proyectos de investigación.
El equipo de trabajo esta siendo liderado por el paleontólogo Rodrigo Otero en conjunto con el Museo de Historia Natural y Cultural del Desierto de Atacama.
Una gran parte de la colección de restos que están al resguardo del museo, han sido recolectados por el equipo del director del Área Museo y Patrimonio de la Corporación de Cultura y Turismo, Osvaldo Rojas, quien además se encuentra colaborando con el equipo de la Universidad de Chile.
“El Museo de Historia Natural, entidad que pertenece a la Corporación de Cultura y Turismo de Calama, dentro de los principales postulados que mantiene es la proyección y la difusión del patrimonio cultural regional. En ese contexto hemos trabajado con múltiples investigadores a nivel nacional en las materias de sus especialidades”, explicó Rojas.
En relación al objetivo que los paleontólogos de la Universidad de Chile tienen en Calama, Alarcón explicó que este proyecto se basa en “la búsqueda y el estudio de vertebrados fósiles y nosotros nos encontramos en Cerritos Bayos, en específico escarbando un vertebrado, un reptil marino”. Además, agregó que para esta excavación cuentan con la participación de varios paleontólogos y también de un técnico de Argentina.
“Cerritos Bayos es bastante rico en fauna marina del Jurásico, de alrededor de 150 millones de años y hay invertebrados marinos y bastantes vertebrados que habitaron en esa época, en lo que ahora es el Desierto de Atacama, en específico en esta localidad que es bastante rica, son relativamente abundantes este tipo de hallazgos”, sentenció Alarcón.
También explicó que no es la primera vez que vienen a la zona más rica en fósiles de Chile. “Hemos tenido unas campañas anteriores en búsqueda de otros vertebrados, búsqueda de vertebrados marinos del Jurásico”, dijo el investigador.
Estarán hasta el 20 de diciembre en la zona hasta excavar y retirar todos los restos del Pliosaurio, los que luego serán llevados para ser estudiados.
“Se compará con miembros conocidos del grupo y ahí se determina si se trata de una nueva especie o de algo ya conocido”, señaló el profesional.
A continuación revisa las imágenes realizadas por Dante R.D. para la revista QUO magazine.
Tras esto, los descubrimientos podrán ser difundidos mediante revistas científicas, charlas y/o encuentros, y los restos serán devueltos al Museo de Historia Natural en Calama una vez sean estudiados en profundidad.
Una de las preocupaciones que tiene Alarcón es que, a pesar de la riqueza paleontológica en esta zona, todavía existe desconocimiento por parte de la ciudadanía en relación al gran tesoro que tenemos en nuestras manos.
“Muchos no tienen idea de lo que tienen en su ciudad, en las cercanías y por eso tampoco está muy protegido, ni lo valorado de que lo debería ser, pero es más que nada porque no se conoce mucho. Nosotros una de las labores es dar a conocer estos hallazgos y hacer que esto cambie”, puntualizó el paleontólogo.