Una investigación, recientemente publicada en la revista científica Aquaculture, estudió por primera vez el efecto simultáneo de factores ambientales del ciclo de vida del Caligus rogercresseyi, especie considerada el terror de las salmonicultura.
Mide en promedio cinco milímetros, habita en las aguas marinas más frías de Chile y es capaz de producir millonarias pérdidas en la industria salmonera. El comúnmente conocido “piojo de mar” es un parásito que genera caligidosis, enfermedad que incluso puede causar la muerte de los peces de la salmonicultura.
La mayoría de las investigaciones que existe en torno a esta especie durante su etapa de vida libre se han centrado en ejemplares del hemisferio norte.
Sin embargo, una reciente investigación en la que participaron científicos chilenos del Centro i~mar de la Universidad de Los Lagos, el Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de la Universidad Austral de Chile (UACh) y la Universidad de Concepción (UdeC), analizó por primera vez el impacto combinado de la salinidad y temperatura sobre los estadios de vida libre del Caligus rogercresseyi, especie que vive en Chile.
“La abundancia de este piojo de mar depende de las variables ambientales. Conocer cómo afecta la temperatura y salinidad a los estadios de vida libre, antes de llegar a su hospedador, es importante porque se consideran que son factores clave en la dinámica poblacional de los organismos y la interacción del ectoparásito entre los distintos centros de cultivo”, comentó el investigador del Centro i~mar, Dr. Jaime Montory, líder del proyecto.
El “piojo de mar” genera heridas en los peces exponiéndolos a infecciones secundarias. Dependiendo del nivel de infestación, podría incluso, reducir su apetito y la eficiencia de la conversión alimenticia y aumentar el estrés, generando una disminución en el crecimiento. Todo ello conlleva a un aumento en los costos de producción para la industria salmonera.
Tras una serie de experimentos donde se sometió al parásito a diversas temperaturas y salinidades, los científicos observaron que los huevos y estadios larvales son sensibles a la salinidad y bajas condiciones meteorológicas.
En Chile, la caligidosis se controla principalmente con la aplicación de tratamientos químicos, lo que perjudica la venta del producto en mercados internacionales. Desde esa perspectiva, los resultados de este trabajo permitirán avanzar en otras medidas de control y mitigación del parásito.
“A pesar de que Caligus rogercresseyi es uno de los principales problemas para la industria del salmón, la estrategia para su control ha sido principalmente adaptar tratamientos con insecticidas usados en la agricultura sin conocer suficiente sobre la biología básica de la especie”, explicó el investigador del Centro IDEAL, Dr. Kurt Paschke.
“Resultados como los de esta investigación contribuyen a comprender la biología de la especie, lo que a su vez, permitirá evaluar medidas de mitigación y manejo más eficientes, que reduzcan los costos de la industria salmonera y disminuyan el impacto al medio ambiente”, agregó.
La investigación publicada en la revista científica Aquaculture cobra especial relevancia debido a que en Chile la salmonicultura sigue en aumento. Todos los centros de cultivo ubicados en las regiones de Los Lagos y Aysén tienen algún grado de infección causada por el “piojo de mar”. Según datos de Index Salmón, la cosecha de salmónidos aumentó un 8,7% en 2017 en relación al 2016, alcanzando un total de 791.103 toneladas por año.