Por primera vez en tres años, y tras una orgullosa racha de 267 éxitos, el cohete Falcon 9 de SpaceX se estrelló al aterrizar en su plataforma.
Así pudo ser visto en la transmisión de este miércoles por la red social X, al cierre de una misión en la cual el vehículo desplegó 21 satélites Starlink en la órbita terrestre.
Específicamente, como quedó registrado, el cohete se tambaleó y prendió en llamas pocos segundos después de tocar la plataforma flotante que le recibe en su reingreso.
Según reporta Ars Technica, el cohete en cuestión había sido enviado al espacio 23 veces, especulándose que el accidente pudo ocurrir por un problema en el motor.
Es la primera vez desde febrero del 2021 que la compañía falla en aterrizar uno de sus cohetes reusables, siendo esta cualidad la que le dio gran ventaja en el mercado aeroespacial.
Debido al accidente, SpaceX anunció que su próximo lanzamiento será retrasado hasta comprender qué ocurrió con este cohete.
El retraso se suma al de la misión Polaris Dawn, que estaba proyectada para el recién pasado lunes, siendo primero postergada para el martes para hacer más revisiones de seguridad, luego para el miércoles debido a una fuga de helio, y finalmente deforma indefinida debido a los pronósticos del tiempo desfavorables para la fecha estipulada de retorno.
Dicha iniciativa también usaría el cohete Falcon 9, pero se desconoce si su itinerario se verá afectado por el incidente, considerando que para SpaceX el aterrizaje de recuperación es un objetivo secundario.
Es decir, pese a que puede costarles millones fallar en atraparlo, no sujetan a este logro el éxito o fracaso de la misión.