Un grupo de científicos de la Universidad Andrés Bello y la Universidad Federal de Santa Catarina, de Brasil, descubrieron un singular objeto en el espacio, el cual no han podido clasificar del todo por ser “extremadamente raro”.
El hallazgo, se dio en el marco de las observaciones para el survey VVVX, que es un mapeo del plano de la Vía Láctea en luz infrarroja, a partir de datos del telescopio VISTA del observatorio ESO Paranal en Chile.
Inicialmente, los astrónomos creen que puede ser una rara mezcla entre una estrella variable cercana y una nebulosa, que también presentaría variables en su brillo.
“A lo largo de 12 años se han descubierto decenas de miles de esas variables, que se clasifican de acuerdo a sus fluctuaciones de brillo. Sin embargo, cada tanto aparecen objetos variables que no pueden ser explicados fácilmente porque no se ajustan a ninguna de las clases conocidas“, explica Dante Minniti en un comunicado, Director del Instituto de Astrofísica de la UNAB.
“Los análisis espectroscópicos posteriores –logrados con el telescopio de 4m SOAR (AURA) en el Cerro Pachón en Chile- revelaron que aquella fuente central es un objeto estelar muy joven que ilumina la nebulosa periódicamente. Se trata de una estrella roja situada en su centro, la que cambia de brillo cada 4 años”, agrega Roberto K. Saito de la Universidad Federal de Santa Catarina, que lideró la investigación, publicada en The Astrophysical Journal Letters.
¿Qué es el objeto extremadamente raro en la Vía Láctea?
Para objetos como este, explica un comunicado del Centro de Astrofísica CATA, existe una clasificación que se conoce como WIT, por las siglas de “What is this?” (“¿Qué es esto?” en español), con la que se cataloga a “fenómenos astronómicos extremadamente raros”. Este fue llamado WIT-12.
Por ahora, los científicos barajan dos teorías. “Podría tratarse de una estrella variable central que produce un eco de luz que se refleja en la parte posterior de la cavidad de la nebulosa que la rodea“, sugiere Minniti.
“Como la nebulosa es tan grande, la luz de la parte más cercana nos llega directamente, o sea que esa parte de la nebulosa aumenta de brillo cuando la estrella es más brillante”, agrega el experto, que además también es uno de los investigadores principales del CATA.
La otra posibilidad sería también un efecto óptico, plantean, ya que podría tratarse de un disco circunestelar doblado que tapa la luz de algunas partes de la nebulosa a medida que esta rota.
“Esto puede ser descrito como un ‘anti-faro’, que al girar proyecta sombra hacia una dirección“, dice Minniti. Los astrónomos esperan resolver el enigma con más observaciones y buscando otros fenómenos similares en el espacio.