Fue en Chile que descubrieron un asteroide catalogado como "asesino de planetas" y que cruza su órbita con la de la Tierra, pero ¿es realmente peligroso?

Se trata de 2022 AP-7, un asteroide “asesino de planetas” que fue descubierto este año desde la Cámara de Energía Oscura, que se encuentra en el Cerro Tololo, en Chile. El estudio fue publicado a fines de septiembre y tras un mes de revisión por pares finalmente fue confirmado.

Si bien este objeto suena alarmante por como es catalogado, el que sea considerado un “asesino de planetas” no significa exactamente que asesinará la Tierra.

Los asteroides entran en este concepto cuando llegan a medir un kilómetro o más de diámetro. Y es que según los científicos, un impacto de estas dimensiones sería devastador para la vida como la conocemos.

Así mismo, el 2022 AP-7 también entra en la lista de los asteroides potencialmente peligrosos (PHA, por sus siglas en inglés) que usa la NASA para categorizar a los objetos “cercanos” a la Terra. Este sería a la fecha, uno de los asteroides más grandes descubiertos que cuentan con estas características.

El descubrimiento fue parte de un estudio en el que buscaban rocas espaciales en las órbitas de la Tierra y Venus igualmente. En específico, los astrónomos encontraron 3 objetos nuevos, que se encontraban ocultos porque habían estado transitando cerca del Sol y su luz los ocultaba.

Sin embargo, toda la atención la acaparó el AP-7, por su gran tamaño de casi 2 kilómetros aproximadamente y porque además, su órbita se cruza con la de la Tierra, según detalla el estudio. Este es el motivo por el cual la NASA lo mantendrá en vigilancia constante.

¿El asteroide “asesino de planetas” es un peligro para la Tierra?

Cabe destacar que los asteroides “cercanos” a la Tierra y “potencialmente peligrosos” tienen distancias medibles que son abismales. En palabras simples, la NASA los identifica en “distancias lunares”.

Para entender aquello, es importante precisar que la Luna está a 300 mil kilómetros de la Tierra y los asteroides comienzan a aparecer dentro de la tabla de objetos cercanos a la Tierra, si es que están al menos a 5 distancias lunares.

Esto significa que, para que un objeto se considere cercano, tendría que estar al menos a un 1,5 millones de kilómetros lejos de la Tierra, por lo que las probabilidades de un impacto serían realmente bajas.