Ver el atardecer, con sus tonos azules, amarillos y anaranjados, es una hermosa experiencia que sin duda todos hemos hecho más de una vez… Pero, ¿te has preguntado cómo sería verlo en otros planetas?

La NASA ha contestado a esta pregunta, publicando dos videos que muestran simulaciones de cómo se vería un atardecer en otros mundos.

La animación permite ver los colores con que veríamos el cielo al final de cada día en Marte, Venus, Urano, Titán (luna de Saturno) y Trappist-1e (un planeta en un sistema solar cercano).

Además, muestra cómo se ve en la Tierra con el cielo despejado, parcial y nublado, para que hagan la comparación.

Todas estas tomas están creadas para simular cómo se verían si uno estuviese dentro del planeta, mirando hacia el cielo.

Los videos fueron realizados por Geronimo Villanueva, un científico planetario de la NASA, quien está haciendo una plataforma computacional que será usada para una posible futura misión a Urano, informó la agencia espacial en su sitio web

“Las simulaciones muestran a estos mundos alejándose de la luz del Sol, que es lo que ocurre cuando vemos un atardecer. Cuando estos mundos rotan, los fotones se dispersan en diferentes direcciones, dependiendo de la energía de los fotones y los tipos de moléculas en las atmósferas. El resultado es una encantadora paleta de colores que sería visible para quienes estén de pie en el interior”, dijo la organización.

La NASA también explicó por qué el atardecer en Urano se ve tan azul, un tono no tan lejano al que podemos observar en el cielo terrestre durante el día.

“Este color azul-verdoso viene de la interacción de la luz solar con la atmósfera del planeta. Cuando la luz -que está hecha de todos los colores del arcoíris- alcanza la atmósfera de Urano, el hidrógeno, helio y metano absorben la parte roja, que tiene mayor longitud de onda. Los azules y verdes -con menor longitud de onda- se dispersan a medida que los fotones rebotan en las moléculas de gas y otras partículas en la atmósfera”, explica la NASA.

La herramienta informática que está desarrollando Villanueva podría ayudar, en una futura misión al helado Urano, a interpretar las medidas de la luz en la atmósfera y determinar de qué está compuesta.