El jueves pasado SpaceX lanzó un cohete que contenía los primeros 60 satélites de su constelación Starlink, proyecto que busca proveer internet desde el espacio y que algún día podría sumar 12.000 satélites.
En la segunda fase del procedimiento, el cohete comenzó a liberar los satélites una hora después del lanzamiento, a una altitud de 440 kilómetros, después de despegar de Cabo Cañaveral, Florida,
“¡Despliegue exitoso de 60 satélites Starlink confirmado!”, escribió la compañía a través de las redes sociales.
El lanzamiento fue visto por diferentes astrónomos alrededor de todo el mundo, uno de los cuales captó el momento preciso en que los 60 satélites cruzan por el cielo, un día después de que fueran puestos en órbita.
Según explicó en un blog el autor del video, Marco Langbroek, él mismo hizo los cálculos para determinar la hora y dirección en que debía dirigir su cámara. Los satélites pasaron tres minutos antes de lo que había estimado.
Cada uno de estos satélites pesa solo 227 kilos y fueron construidos en Redmond, cerca de Seattle.
SpaceX ha obtenido el permiso de las autoridades estadounidenses para lanzar 12.000 satélites, distribuidos en varias órbitas. Sin embargo, Elon Musk -fundador de la firma- explicó que 1.000 serían suficientes para que el sistema sea “económicamente viable”.
“Starlink” comenzará a funcionar una vez que se hayan activado 800 satélites, lo que requerirá una docena de lanzamientos más.