La nave de la compañía de turismo espacial Virgin Galactic cruzó el viernes de nuevo la frontera del espacio, según la definición estadounidenses de 80 kilómetros de altitud, durante un vuelo de prueba en California, anunció la empresa del millonario británico Richard Branson.
SpaceShipTwo, comandada por dos pilotos, cruzó por primera vez en diciembre este límite arbitrario, cuando Branson anunció con fanfarrias que era la primera vez que se atravesaba desde el final en 2011 del programa de transbordadores espaciales de la Nasa en 2011, que llevaba humanos al espacio.
La convención internacional estableció de todas formas la frontera del espacio más alto, a 100 km, en la “línea de Karman”.
Este segundo vuelo de la nave comercial, además de los dos pilotos iba por primera vez una pasajera, por lo que se puede decir que es la primera vez que llevan una “turista” al espacio.
Se trata de Beth Moses, que es la jefa de instrucción de astronautas de Virgin Galactic. Tras este vuelo, Moses se convirtió en la persona número 571 en llegar al espacio y en la primera mujer en volar en un vuelo espacial comercial, indicó la compañía en un comunicado.
La nave alcanzó una velocidad de Mach 3.0 durante su ascenso. Aterrizó sin incidentes en la base especial del desierto de Mojave. “SpaceShipTwo, bienvenido al espacio”, escribió Virgin Galactic, quien tuiteó en vivo el vuelo, pero no difundió imágenes en directo.
SpaceShipTwo esta diseñado para transportar a seis pasajeros turistas, pero las pruebas se han retrasado durante años, en parte debido a un accidente en pleno vuelo en el que murió un copiloto en 2014.
Richard Branson dijo el 7 de febrero a la AFP que espera que las pruebas estén suficientemente avanzadas en julio próximo para poder ocupar un lugar a bordo.
La principal competencia de Virgin Galactic es Blue Origin, fundada por el millonario Jeff Bezos, dueño de Amazon.
La nave espacial New Shepard de Blue Origin ha cruzado los 100 km, pero nunca con personas a bordo. Bezos sugirió que eso podría ocurrir este año.