La necesidad de contar con ingenieros para generar cambios en la sociedad

Suena la alarma de tu teléfono móvil a las 6:30 horas, te duchas mientras dejas tu máquina preparando el café, luego te vas al trabajo.

Desde el celular, el software que lo hace funcionar y el que administra la alarma, el calefactor del agua con que te duchaste, el medio de transporte en que llegaste a tu lugar de trabajo, la infraestructura del camino por el que circulaste, buena parte de tus herramientas de trabajo, los procesos de la organización en que te desempeñas, fueron desarrollados por ingenieros. No nos ves, pero nuestra mano está en todas partes.

Esto lleva a la pregunta de qué es un ingeniero. En palabras simples, somos profesionales de formación universitaria, que hacemos aplicación de conocimiento basado en ciencias básicas (eminentemente matemática, física y/o química) para desarrollar soluciones con recursos y tiempos limitados; no necesariamente somos científicos, sino que hacemos el puente entre la ciencia teórica y la aplicación práctica.

Algunos ejemplos

El Ingeniero Civil, al construir un camino, realiza gran aplicación de física, cálculos de resistencia de materiales, entre otros; el Ingeniero Civil en Informática, aplica conocimiento basado en matemática abstracta, al diseñar y operar una base de datos utiliza álgebra y cálculo relacional, además de lógica y teoría de conjuntos; el Ingeniero Civil Químico, su nombre lo dice todo; además todas las especialidades cuentan con sólida formación en estadística y métodos de optimización, lo que es fundamental al momento de optimizar procesos y recursos.

Lamentablemente, la poca regulación en la creación de carreras ha permitido que se forme una serie de programas de estudio con el nombre de Ingeniería, sin que lo sean; de tal forma que, con fines comerciales, a cualquier técnica se le da el nombre de Ingeniería.

El aprendizaje de ciencias básicas, ayuda a formar el pensamiento lógico, constancia, método y mucha disciplina; elementos valorados y son algunas de las razones por las que ingenieros ocupan posiciones de liderazgo y administración en distintas organizaciones.

Eso en el ámbito de lo privado, porque en general tenemos baja tendencia a involucrarnos en temas públicos.

Podemos mejorar nuestras sociedades a partir de nuestra experiencia, con propuestas y análisis rigurosos; también poniendo nuestro conocimiento al servicio de las personas y no solo en la necesaria preocupación por el sustento propio. Ahí existe una gran oportunidad para los estudiantes que deben desarrollar sus tesis.

Nos encontramos en un tiempo de cambios y demandas sociales, momentos en que a veces predominan consignas importadas, cultivadas en facultades de Ciencias Sociales.

Entre marchas, y grupos que imponen sus ideas como una verdad única e indiscutible, se hace necesaria la participación de personas con criterio ingenieril, con el necesario pragmatismo que viene de criterios basados en evidencia, proveniente de la recopilación de datos antes que la reacción visceral, y con propuestas de soluciones concretas y viables. Se echa de menos la visión que podemos aportar a las sociedades.

Ingenieros, abrámonos a leer de otros temas y participar desde donde nos encontremos en el intercambio de ideas. Nuestra mano está en todas partes pero no nos ven, y ya es necesario que nos vean. Feliz día colegas.

Eric Melillanca Torres
Magíster en Ingeniería Industrial
Ingeniero Civil en Informática
Presidente de Corporación Mapuche Trawün