Con su belleza y elegancia, la tailandesa ha dejado a todos impresionados. Acaba de cumplir 75, pero se ve como su estuviera en sus treinta.
Hay historias que realmente sorprenden, y sin duda la de Apasra Hongsakula es una de ellas.
Y es que, a sus 75 años, la ex Miss Universo sigue dando que hablar, precisamente, por mantener intacta la belleza que la hizo merecedora de la corona del certamen mundial hace más de cinco décadas.
Los altos y bajos de su carrera y vida personal, junto con su ímpetu para mantenerse en boga pese a la edad, la han vuelto un ícono de su país y de internet, donde miles de cibernautas han celebrado su vigencia.
Esta es la historia de Hongsakula y su legado en el reconocido concurso de belleza.
De Tailandia al mundo
Apasra nació el 17 de enero de 1947 en Bangkok, donde también pasó su niñez. Años más tarde, sus padres decidieron invertir en su educación y la enviaron a un internado de jóvenes ubicado en Penang, Malasia, donde de inmediato comenzó a llamar la atención de sus compañeros y profesores por su belleza y elegancia.
De acuerdo a Univisión, en 1964 su vida cambió por completo luego que a sus 17 años, y mientras era una estudiante, se presentara al certamen Miss Tailandia y destacara por sobre las demás aspirantes, llevándose la corona del concurso.
Este honor la puso de frente a los ojos de todo un país, el cual veía en esta hermosa joven una oportunidad de ser reconocido en el mundo.
No estarían equivocados.
El triunfo: Miss Universo
Pero el camino hacia el certamen global, que ese año se celebró en Estados Unidos, no estuvo exento de gloria.
De acuerdo al libro Pan-Asian Sports and the Emergence of Modern Asia, 1913-1974, se cree que la entonces soberana de Tailandia, la reina Sirikit, habría tomado especial interés en la ganadora de la actividad de belleza y se habría encargado personalmente de preparar su ruta a Miss Universo.
Tras un arduo trabajo a puerta cerrada, el cual incluyó clases de postura y varias pruebas de vestuario, tomó sus maletas y viajó a Miami Beach, donde el 24 de julio de 1965 cambiaría su vida para siempre.
Esa noche, la joven llegó a las finalistas producto de su gracia, elegancia e imponente belleza. Disputó el trono con otras cuatro concursantes, quienes representaban a Estados Unidos, Suecia, Finlandia y Holanda. La mujer destacó en el grupo por ser la única morena y de origen asiático.
Precisamente, estos aspectos se convirtieron en atributos determinantes para los jueces, quienes decidieron que Hongsakula merecía la corona.
“Conquistó al público y al jurado con su belleza exótica y costumbres de la realeza tailandesa, fuera del estereotipo latino o caucásico que dominaron al Miss Universo”, destacó la web Global Beauties, especializada en reinas de belleza.
El regreso a Tailandia
La joven dio un triunfo moral a Tailandia que nadie se esperaba.
Al volver se convirtió en una de las figuras más seguidas por grandes y chicos. Tanto así, que el propio gobierno decidió nombrarla embajadora cultural del Ministerio de Turismo de su país.
En lo personal, también estaba en la cúspide. En 1967 se casó con el sobrino de la reina Sirikit, con quien tuvo a su primer hijo. Sin embargo, se divorciaron dos años después.
Posteriormente tuvo otro hijo producto de un segundo matrimonio, el cual también terminó.
Vinculada a Miss Universo
Con el paso de los años, Hongsakula permaneció como una de las figuras más reconocidas de su natal Tailandia y mantuvo cierta relevancia a nivel mundial, en lo relacionado al mundo de la belleza.
Tanto así, que la mujer fue convocada en otras dos oportunidades a formar parte de Miss Universo, donde pudo compartir su experiencia con las aspirantes más jóvenes.
En específico, el certamen la llamó a oficiar como jurado de las ediciones de 1973, la cual se celebró en Atenas (Grecia), y la de 1979, que se realizó en Perth (Australia).
También estuvo presente durante el concurso de 2005, el cual se celebró en Tailandia.
La “vuelta” a la fama
En los últimos años Apasra se ha dedicado a causas sociales y benéficas aunque, principalmente, a su familia. No obstante, una imagen que comenzó a circular en redes sociales en 2014 le dio un inesperado “minuto de fama” con las nuevas generaciones.
Se trataba de una promoción de su spa en Bangkok en la que quedó demostrado, a simple vista, que la ex Miss Universo parecía “no envejecer” en absoluto.
Ante el revuelo provocado por la imagen en dicha oportunidad, el agente de Hongsakula emitió un comunicado a nombre de la mujer argumentando que su fisonomía “casi intacta” se debía a que mantenía una vida sana, basada en una buena alimentación y complementada con ejercicio diario.
Pese a ello, muchos afirmaron que la mujer debió haberse sometido a múltiples retoques de belleza, aunque consideraron que estos fueron realizados con precisión debido a lo bien que lucía.
Apasra en la actualidad
A sólo semanas de haber cumplido 75 años, la recordada reina de belleza aún mantiene vigente su imagen de celebridad.
Lo anterior, ya que pese a haber alcanzado la fama hace muchísimos años, hoy sigue siendo una figura reverenciada en Tailandia al ser considerada como alguien de la familia real.
Sumado a ella, está indirectamente ligada al mundo político, considerando que su hermana menor, Paveena, se convirtió en una figura política prominente en su país que llegó a formar parte del parlamento local.
Además, es invitada continua a diferentes festivales de cine, conmemoraciones de la realeza y un sinfín de actividades en las que se luce con su encanto y hermosura.
Finalmente, cabe destacar que a la ex Miss Universo tampoco le va mal en redes sociales. En Instagram supera los 34 mil seguidores, quienes celebran cada paso de la recordada representante tailandesa.
A continuación, te compartimos algunas imágenes de Apasra Hongsakula en la actualidad: