La actriz Ariana DeBose, conocida por su papel de Anita en la última adaptación de la película West Side Story, presentó por tercer año consecutivo la gala de los premios Tony, conocidos como ‘los Óscar del teatro’. En su 77 edición, se celebraron en el teatro Lincoln Center de Nueva York.

Stererophonic, la historia de una banda de rock a punto de disolverse, fue una de las triunfadoras, pues se llevó premios a mejor pieza de teatro, mejor actor de reparto en obra de teatro para Will Brill y mejor dirección a Daniel Aukin, además del premio al mejor diseño de sonido.

Por su parte, The Outsiders, inspirada en parte en la película de Francis Ford Coppola del mismo título, se llevó el Tony al mejor musical y el de mejor dirección de un musical para Danya Taymor; a estos galardones suma el de mejor diseño en sonido de un musical y mejor iluminación, obra de Cody Spencer el primero y de Brian MacDevitt y Hana S. Kim el segundo.

En cuanto a Hell’s Kitchen, una obra sobre los primeros años de la carrera de Alicia Keys que partía con 13 nominaciones, no pudo confirmar su condición de favorita, pero se llevó al menos el premio a mejor actriz de musical para Maleah Joi Moon y el de mejor actriz de reparto para la veterana Kecia Lewis.

Jonathan Groff (Frozen, Glee) ganó su primer Tony por su participación en Merrily We Roll Along como mejor actor protagonista de un musical. Esta era su tercera nominación y recibió el galardón muy emocionado, ante un público que se levantó de sus asientos para aplaudirlo.

Y su compañero de elenco, Daniel Radcliffe, también se llevó su primer Tony por Merrily We Roll Along , como mejor actor destacado en un musical, expresando “voy a hablar rápido y trataré de no llorar” y calificando su experiencia en la obra como una de las mejores de su vida.

En el apartado de actuación teatral, Jeremy Strong (Succession) conquistó el Tony al mejor actor principal por An Enemy of the People, una victoria del actor -también ganador de un Emmy- que definió la obra ante el público como un “grito del corazón”.

El premio a la mejor interpretación de un actor en un papel destacado en una obra de teatro fue para Will Brill por Stereophonic, quien se salió de las dedicatorias más trilladas y dedicó el galardón a su terapista.

Kara Young ganó, por su parte, el Tony a la mejor actriz destacada en una obra de teatro por Purlie Victorious: A Non-Confederate Romp Through the Cotton Patch.

En la apertura de esta velada tan neoyorquina, Alicia Keys apareció al piano para interpretar un popurrí del musical Hell’s Kitchen, antes de llamar al rapero Jay-Z al escenario para interpretar juntos la canción Empire State of Mind.

Con gran presencia de actores de Hollywood, entre los que destacaba Angelina Jolie, productora de la obra The Outsiders, esta 77 edición sorprendió con la aparición de Pete Townshend, el líder de la mítica banda británica The Who, quien se unió al elenco del musical The Who’s Tommy para interpretar el tema Pinball Wizard.

Además, el premio al mejor vestuario de musical fue para Linda Chao (su segundo Tony), por su trabajo en El gran Gatsby, la adaptación musical de la novela clásica del estadounidense Scott Fizgerald, mientras que Justin Peck (Illinoise) obtuvo el Tony a la mejor coreografía.