La obra de la actriz, dramaturga y directora uruguaya Marianella Morena aborda -desde lo íntimo- temas como el amor, el despecho, ansias, soledad, manipulaciones y vulnerabilidades, entre otros. En una versión que remueve.
Fedra
El mito griego de Fedra tiene muchas versiones. Todas plagadas de enredos, amor y desamor, despecho. De relaciones tortuosas y poco sanas. Como Fedra raptada por Teseo, después de abandonar a la hermana de ésta. O Fedra que se enamora perdidamente del hijastro de Teseo.
Por supuesto, las versiones presentan una Fedra manipuladora, mentirosa, y terminan en tragedia. Un mito revisitado por Eurípides, Séneca, pasando por Miguel de Unamuno y decenas más, tanto en las letras como en las artes visuales.
La propuesta de Marianella Morena es actual. Contemporánea. Sus referencias al mito, en forma explícita, van un poco más allá de mencionar los nombres de Fedra, Teseo e Hipólito.
Y, en escena, solo veremos a Fedra y a un Hipólito, secundario, que toca la guitarra y canta. Y al público que se integra a este espacio íntimo.
En Yo soy Fedra, solo aparece la mirada de la protagonista. Una versión desde su intimidad. Desde un espacio donde afloran sus emociones, pasiones, ansiedades, despechos, frustraciones, dependencias, sus vacíos y vulnerabilidades.
Con una mirada absolutamente femenina, la obra no cae en frases fáciles, hechas. De trincheras. Es más bien una suerte de monólogo, de reflexión interior, cargada de obsesiones. Donde Fedra se desnuda, se muestra, pero no sabremos qué es real, son hechos, y qué cosas son percepción, proyección, imaginación o manipulación.
En la obra no hay juicios, ni sobre Fedra ni sobre los demás (más allá de lo que ella dice), sino un mostrar que todo lo anterior se mezcla, se confunde, entre juicios, percepciones, manipulaciones y estrategias para sobrevivir. Con el trasfondo, tan humano, de la necesidad de amor y la angustia ante la soledad.
Obra actual
Lo actual de la obra -más allá de hacer referencia a un clásico (es decir, que logran ser universales y atemporales en sus temas profundos)- está en el espacio físico y simbólico) donde se sitúa y la mirada íntima femenina. Centrada en los afectos y las subjetividades vinculadas a éstos. En el espacio donde se desarrolla y, en especial, en los temas que trata.
Hoy, lo íntimo femenino, las dependencias afectivas, los roles de género, la soledad, la salud mental, son temas que han adquirido importancia. Yo soy Fedra los aborda de manera frontal, descarnada, intensa. Con una actuación sobresaliente que posiblemente lleve al público a un péndulo entre la empatía y el rechazo hacia Fedra. Un péndulo que en muchos resonará internamente.
Actriz, dramaturga y directora, Marianella Morena (Sarandí Grande, 1968) se formó en Uruguay, Argentina, Francia y Polonia.
Es una de las artistas uruguayas más importantes, con obras programadas y formando parte de investigaciones en más de 15 países. Sus obras se refieren a lo real, lo actual y lo político.
Sus textos han sido publicados en Uruguay, España, Cuba, Francia, y México.
Premios y nominaciones
Recibió el Premio Moliere (Francia) y el premio BUHO (Uruguay). Ha sido premiada en dos ocasiones por el CCE (Centro Cultural de España en Montevideo), por la UBA (Universidad de Buenos Aires), y dos veces ha sido nominada a los premios ACE (Premios de la prensa de Buenos Aires).
Yo soy Fedra
Dramaturgia y dirección: Marianella Morena
Intérprete: Noelia Campo
Música: Lautaro Moreno
Diseño de espacio: Ivana Domínguez, Mariana Pereira
Diseño de iluminación: Ivana Domínguez
Vestuario: Mariana Pereira
Asistente de dirección: Agustín Urrutia
Letra de canciones: Marianella Morena
Preparación vocal: Ximena Bedó
Preparación corporal: Rosina Gil
Diseño gráfico: Nicolás Batista
Fotografía: Lucía Silva Musso
Producción en gira: Lucía Etcheverry
Co-Producción: Sala Verdi – Lucía Etcheverry
País: Uruguay
Duración: 60 minutos
Recomendación: +15 años
Funciones: 15 al 17 de enero. Lunes y miércoles a las 18 horas, martes a las 19 horas.
GAM, en Sala N1