Los Bunkers sin Mauricio Basualto: Crónica de su momento más doloroso en 25 años

Pasadas las 20:00 horas de ayer lunes, Los Bunkers emitieron el comunicado más importante de sus 25 años de carrera. Luego de casi seis meses de incertidumbre, el grupo penquista confirmó la salida de su baterista fundador, Mauricio Basualto.

“Ha sido una decisión compleja, meditada y consensuada que, más allá de la tristeza que acarrea, hemos entendido como el paso correcto en honor a la historia del grupo, su presente y su desarrollo en el futuro”, se lee en el párrafo más duro del texto.

“Mauro siempre será parte de la historia de Los Bunkers y nos sigue uniendo una amistad de más de 20 años. Sin su energía y talento la banda no estaría en el lugar que ocupa hoy. Por esta razón, le deseamos lo mejor y mucha luz en los caminos que decida transitar desde ahora en adelante”, agrega la misiva, que ayer se hizo viral en redes sociales tan rápido como los redobles de Basuelto.

A días de haber presentado uno de los shows más importantes de la gira de regreso “Ven Aquí” (en el mítico Palacio de Los Deportes de Ciudad de México, el 13 de julio pasado), una pregunta incómoda de inmediato comenzó a rondar entre los seguidores del conjunto: ¿Y ahora qué?

Los Bunkers sin Mauricio Basualto

Los problemas comenzaron, exactamente, el 1 de febrero de este año en Iquique, cuando a raíz de un cuadro de hipertensión Los Bunkers debieron suspender un recital con el público ya congregado en La Casa del Deportista.

Tras cuatro canciones en vivo (las últimas para Basualto), fue el guitarrista Mauricio Durán quien tuvo que explicar la situación.

“(M. Basualto) tiene que tomarse unos exámenes ahora y ver qué podemos hacer. Tenemos que esperar la resolución médica (…). A nombre de mis compañeros y de todo el equipo, les pedimos disculpas y adquirimos el compromiso de que este show sí se va a realizar en algún momento, no sabemos cuándo, pero esperamos lo más pronto posible”, dijo entonces.

Con el segundo tramo chileno de la gira “Ven Aquí” a cuesta, los penquistas tuvieron que reaccionar rápido, sobre todo considerando el tamaño de los hitos que venían por delante: su regreso al Festival de Viña del Mar tras 12 años, y la fecha doble del Estadio Nacional.

Para cumplir los compromisos ya adquiridos, Los Bunkers sumaron a otra chilena con experiencia mexicana: la baterista y cantautora Cancamusa. Pero para Natalia Andrea Soledad Pérez Peralta, su nombre natal, no fue tarea fácil.

Alejada alrededor de un año de las baquetas, y en pleno proceso de presentación de su segundo disco como solista, “Amor minimal” (2023, que incluso le valió un Premio Pulsar 2023 a la Mejor Artista Pop), la chilena (ahora con guitarra al hombro) tuvo apenas una semana para aprenderse el repertorio del grupo.

“Fue una preocupación de salud alta para todos nosotros. Tuvimos que replantearnos la gira”, contó el vocalista Álvaro López al podcast “¿Qué es la música?” del productor musical mexicano Javier Paniagua, hace 11 días.

“Afortunadamente, lo que le sucedió (a Basualto) no significó problemas mayores, que pudieran haber estado. Desafortunadamente, aún lo tienen incapacitado para poder acompañarnos haciendo esta gira”, agregó antes de agradecer que “encontramos a Cancamusa, que rápidamente pudo llegar y en un par de ensayos echarse al hombro el reportorio completo”.

Gonzalo López, en la misma entrevista, complementó: “Su vibra ayudó mucho a esos momentos, que son estresantes… Tanto sus capacidades como su personalidad hicieron que el trabajo fuera entretenido y llevadero de desarrollar”.

Mauricio Durán, desde ahora y tras la salida de Basualto el Búnker más longevo de la banda, explicó: “Cuando hay un talento de ese nivel, que es también bien descomunal, a uno le permite entregar esa confianza. A ella la avala una personalidad que es muy amable y cariñosa; amorosa en el buen sentido de la palabra con respecto a lo que significa la banda, y las canciones de la banda. Tiene un talento que justifica todo”.

Los Bunkers y los hitos históricos (sin Basualto)

A días de su reposo, el 6 de febrero pasado, el conjunto entregó más detalles de la recuperación. “Hoy (Mauricio B.) llegó a Concepción, en donde su prioridad será cumplir el período de reposo que los médicos le indiquen”, informaron.

Con Cancamusa en sus filas, el colectivo arribó semanas después a la Quinta Vergara, donde regresaron al Festival de Viña del Mar a 12 años de su última visita. En el show, la batería rosa de Cancamusa capitalizó la transmisión televisiva, y en escena Los Bunkers dedicaron la presentación a su integrante convaleciente.

“Fuerte el aplauso para Cancamusa, por favor… Le queremos agradecer a Cancamusa por aprenderse todas estas canciones en tiempo récord, y por acompañarnos esta noche y así poder tocar para ustedes”, selló Mauricio Durán en la Quinta Vergara.

Semanas después, durante su paso por el Estadio Nacional (donde Los Bunkers marcaron el hito de agendar dos presentaciones seguidas, tal como Los Prisioneros), Basualto otra vez estuvo ausente.

Tras la publicación de la noticia más gravitante en la historia de la banda en 25 años, todo parece indicar que será la exbaterista de Mon Laferte y Javiera Mena quien asuma el sillín del quinteto en las presentaciones en vivo, aunque aún no hay confirmaciones. Eso, de seguro, vendrá más adelante. Por ahora, Los Bunkers continúan recibiendo pésames, al inicio de una dolorosa etapa que ya se palpa extraña y nueva.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida por Los Bunkers (@losbunkersoficial)