Esta semana, tras la primera reunión de la Comisión Organizadora del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar, se confirmó el regreso de un viejo conocido como director televisivo del evento: Álex Hernández.
El retorno del otrora ideólogo de “Mekano” se concreta a 5 años de su último paso por el certamen, donde con no pocas críticas a cuesta se hizo cargo de la dirección general y la puesta al aire entre 2013 y 2019.
Las luces
Hernández estuvo al frente del festival cuando este fue licitado a Chilevisión, en un periodo donde se hicieron cambios significativos en la escenografía de la Quinta Vergara y en la estructura misma del show. Con Rafael Araneda como rostro ancla, el periplo también marcó el retorno de los grandes nombres del anglo al escenario viñamarino.
Sting en formato sinfónico, Morrissey, Elton John, Albert Hammond, Peter Cetera, Rick Astley, Yusuf Islam (Cat Stevens), Rod Stewart, Lionel Richie, Europe y Jamiroquiai, entre otros, marcaron esta licitación. Sin embargo, cabe señalar que Hernández no se hizo presente en el festival hasta 2013, todo esto a raíz de un diagnóstico médico que lo marginó de las primeras dos versiones del certamen (la transmisión televisiva del show de Sting, de hecho, estuvo a cargo de Juan Pablo González).
Tras recuperarse, se sumó a los equipos de trabajo como director del festival.
Por esos mismos años, también desfilaron leyendas consolidadas (Don Omar, Wisin y Yandel, Calle 13) y estrellas que luego conquistarían el mundo, como Bad Bunny, J Balvin y Becky G.
Si bien hasta hoy se define al periodo 2011-2018 como uno de los más virtuosos en la era siglo 2 del festival, Álex Hernández también fue blanco de críticas.
Las sombras
En su primer certamen con CHV, el director fue duramente cuestionado por las actuaciones humorísticas de Mauricio Flores, Óscar Gangas y Dino Gordillo, quieren triunfaron ante el “monstruo” con rutinas teñidas de humor sexista y sexual, además de garabatos e insultos.
Incluso, esa semana, un medio de circulación nacional tituló en portada la palabra “Festi-flaite”, en alusión al debate al respecto.
Años más tarde, en 2017, Hernández tuvo que hacer frente a una campaña impulsada por activistas viñamarinos que pedían la cancelación del evento a raíz de los incendios forestales que afectaron la zona durante el verano.
Ese mismo año, a su vez, volvieron los cuestionamientos por los chistes subidos de tono, en particular en la actuación de Chiqui Aguayo.
Al momento del show de Rodrigo Villegas, en tanto, Hernández tuvo que enfrentar una situación pocas veces vista en la Quinta Vergara: un enfrentamiento entre personas del público que motivó la intervención de los animadores para que Villegas pudiese continuar con su rutina.
Del último festival de Chilevisión, quizás una de las postales más recordadas fue la entrega del primer premio al Artista Ícono de Viña Mar al español Miguel Bosé, quien se sorprendió al recibir un “collage” con fotografías de sus estadías anteriores en la Quinta Vergara.
El gesto fue duramente criticado, tanto en redes sociales como en la prensa local.
Álex Hernández: el caso Jamiroquai, la cámara hiperbárica y denuncias de maltrato
Ese mismo año, Hernández volvió a ser objeto de reparos durante la transmisión del show de Jamiroquai, donde las cámaras se enfocaron casi exclusivamente en el público y no en la banda británica.
Tras los emplazamientos en redes sociales, Hernández entregó su versión de los hechos: “Quería transmitir las sensaciones de la gente… Lo que sucedió hoy día es que Jamiroquai tiene un público que obviamente lo quiere ver más a él”, dijo, tal como señala un reporte del portal Emol.
“Cuando llegaron las críticas, uno lo toma independiente de cómo venga escrito, uno lo toma como crítica, no como aporte. Lógicamente que tomamos unas medidas de bajar un poco la intensidad de lo que estábamos haciendo y ponerle un poco más al show porque la gente lo estaba pidiendo”, agregó.
Cuando Hernández ya estaba fuera del evento, en 2023, un reportaje del portal Interferencia denunció irregularidades y supuesto maltrato laboral de parte del director durante su último año al frente del festival.
“Álex Hernández –ex director de Mekano y Yingo- fue alejado del certamen el año 2019 a causa de sus exigencias que incluían una cama hiperbárica sólo para él en su habitación de hotel durante los días del evento”, señalaba el artículo. La respuesta de Hernández no se hizo esperar.
En conversación con BioBioChile, contestó: “La famosa cámara hiperbárica es un recurso que se consiguió un año de línea por canje con una empresa que tenía este recurso”.
De acuerdo a su relato, dicha cámara se ubicó en un salón del Hotel Gala, “con la finalidad de que cualquier funcionario que estuviera vinculado con el festival, pudiera usarla en caso de lesiones o en caso de cualquier inconveniente físico en que la cámara hiperbárica pudiese ayudar”.
Sobre los denunciantes, quienes no especificaron las supuestas situaciones de maltrato, apuntó: “Este equipo no tenía nada que ver conmigo, menos estar en mi pieza (…). Una cámara hiperbárica es imposible que entre en una habitación de lo que es Gala, es ridículo que yo haya pedido eso como exigencia mía”.
Sobre este punto, agregó: “Es una maquinación de una persona que ya no está en TVN, que generó unas quejas con respecto a mí, y que fueron tratadas directamente”.
“Yo pedí que esto se tratara con los ejecutivos de TVN y, al hablar con los ejecutivos y todas las personas que fueron al festival el año 2019, confirmaron que yo jamás he maltratado a ninguna persona”, dijo.