La alcaldesa Macarena Ripamonti se refirió a algunas de las novedades que tendrá este año el Festival de Viña del Mar.
A casi un mes del retorno del Festival de Viña del Mar tras dos años de suspensión por la pandemia, la alcaldesa Macarena Ripamonti detalló algunos de los preparativos que se alistan de cara a la versión número 62 del evento.
“Después del incendio, y de ver el sufrimiento de la gente y tener ese nivel de estrés, creo que estamos preparados para cualquier cosa”, comentó en diálogo con Radio Bío-Bío Valparaíso al ser consultada sobre su próximo desafío.
“Mi expectativa de esto es honrar lo que creo que es parte del patrimonio de la ciudad, y del país. Se espera que haya encuentro. Hubo dos fechas en donde no se ha realizado (el festival), y es parte de una tradición de nuestro país. Hay muchas cosas que ocurren ahí”, reflexionó.
“Además, estoy preparada porque creo que es el momento de entregar ciertos mensajes, porque hay una vitrina muy grande”, continuó Ripamonti.
“Es una bonita oportunidad. Le hemos puesto corazón para preparar todo y brindarle a la gente un espectáculo como lo amerita: de altura, de prudencia, de belleza. Estoy con hartas expectativas”, aseguró.
A su vez, se refirió a una de las novedades que tendrá Viña 2023: el registro de métricas para cuantificar su alcance socio-económico.
“Vamos a medir, vamos a ver su impacto, y cómo se relaciona con la cadena de valores de Viña del mar. Cómo funciona como envión en términos de activación económica, y qué se puede hacer mejor”, detalló Ripamonti.
El objetivo de esta estrategia, según la alcaldesa, es “tener a la vista los antecedentes cuando tengamos que levantar la siguiente licitación; para saber cuánto nos tienen que pagar los canales de televisión (por la licitación)”, ejemplificó.
En relación a otros eventuales cambios, sin embargo, acotó: “Uno siempre puede reflexionar sobre los elementos del festival, pero lo importante es que esas decisiones vayan acompañadas de lo que le haga bien al festival”.
“Aquí estamos conectados con Disney, salimos por plataformas incalculables, la competencia la ven desde distintos países del mundo (…). Yo quiero que (el festival) entre en nuestra cadena de valor de la ciudad. Porque para muchos viñamarinos, y a mí me ha pasado por muchos años, es que se ha perdido el componente viñamarino, y esa respuesta (al por qué) no la tengo. Me gustaría que sintamos más orgullo, más sentido de pertenencia de los viñamarinos con el festival”, dijo.