Tras casi agotar los tickets de los dos shows que ofrecerá en el Teatro Caupolicán (30 de septiembre y 1 de octubre), y después de dos años de postergaciones a raíz de la pandemia, el prestigioso guitarrista de jazz Pat Metheny agendó una tercera presentación en Santiago, esta vez en formato “gala” y con público reducido.
La cita será este jueves 29 de septiembre en el Teatro Oriente, y se convertirá en su primer show en el país en 26 años. A pesar del hito, Metheny quita presión al asunto. “Estoy encantado de poder volver a tocar. En este mismo momento, estoy en el concierto N° 137 de los 160 que haré este año. Ha sido realmente genial poder volver a tocar”, comenta a BioBioChile desde Estados Unidos, donde por estos días desarrolla la gira “An Evening with Pat Metheny”.
De sus visitas en 1987 y 1993, el integrante más joven del mítico Downbeat Hall of Fame asegura conservar “los recuerdos más increíbles”, aunque advierte que ahora la fórmula será distinta.
“El concepto esta vez es simple: reunir un grupo realmente excepcional de músicos y escribir algo para ellos. Pero además, que también puedan tocar cualquier cosa de cualquier momento de mi carrera. Esta es una excelente banda en vivo”, recalca. Y aunque el conflicto de interés es evidente, el estadounidense no exagera.
Pat Metheny después de 20 Grammys: “Sigo tratando de aprender”
En Chile, lo acompañará el baterista mexicano Antonio Sánchez, ganador del Grammy 2003 al “Mejor Álbum de Jazz Contemporáneo” por “Speaking of Now” y autor de la banda sonora de la oscarizada “Birdman” (Alejandro González Iñárritu); la bajista Linda May Han Oh (estrella del jazz neoyorkino); y el pianista británico Gwilym Simcock.
“Desde hace unos 10 años que le he puesto ojo a Gwiylm Simcock. En mi opinión, es uno de los pianistas más talentosos que han surgido en mucho tiempo. Y comparte algo con otro de mis pianistas favoritos, Brad Mehldau, en el sentido de que tanto él como Brad afirman haberse inspirado a trabajar esta música al escuchar algunos de mis discos, cuando eran niños”, comenta el ganador de 20 premios Grammy.
En la misma línea, recuerda cómo dio forma al cuarteto: “Con Antonio y Gwilym ya inscritos, fue una oportunidad interesante explorar quién estaba ahí afuera… Hay una rara abundancia de músicos en este momento en Nueva York. Me propuse salir y ver a todos los que podía, o tocar con los que me habían recomendado. Y después de una búsqueda bastante extensa, Linda Oh llegó a la cima como la mejor opción”.
“Ella es especial. Tiene todas las habilidades requeridas; tiempo, profundo conocimiento armónico y un gran sonido en el instrumento y técnica de sobra; pero hay algo más. Como música tiene una especie de presencia que invita a sus oyentes a seguir los detalles de la historia que cuenta. Hay una profundidad narrativa en sus solos y en sus líneas”, agrega.
En casi 50 años de carrera, Pat Metheny ha cruzado permanentemente los límites del jazz, colaborando con glorias del género como Ornette Coleman, Herbie Hancock, John Scofield y Jim Hall, pero también entablando alianzas con músicos connotados como David Bowie (“This is not America”), Carlos Santana, Milton Nascimento, Pedro Aznar y Enrique Morente, entre otros.
Sobre los shows en Chile, lanza otra advertencia: “Los conciertos son muy largos y cubren MUCHO terreno. Estoy seguro que las personas que me han seguido lo disfrutarán, y, de la misma forma, alguien que no esté realmente tan familiarizado con esto, también lo disfrutará”, dice.
(P): Vendrá a Chile con el elogiado Antonio Sánchez, cerebro musical detrás de la película “Birdman”. ¿Cómo definiría el aporte de este músico al cuarteto?
(R): Nunca puedo decir lo suficiente sobre Antonio. Como suelo decir, es el baterista que nunca pensé que nacería. Ciertamente, ha sido mi colaborador más importante durante estos últimos casi 20 años, más o menos. Siento que puede contribuir a casi cualquier proyecto que lance. Y nuevamente, su madurez y falta de dramatismo son muy importantes para mí. Es uno de los mejores músicos que he conocido y es realmente uno de los grandes de todos los tiempos en su instrumento. Me encanta tocar con Antonio.
(P): En una entrevista reciente, señaló que en su casa no hay premios en las paredes, y que solo le importa vivir el “ahora”. Después de haber ganado 20 Grammys, ¿aspira a algún tipo de reconocimiento?
(R): Realmente no aspiro a mucho, excepto a ser un buen músico. Todo lo que ha pasado, ha sucedido solo por eso. Así que sigo trabajando en la música y tratando de aprender.
(P): ¿Ha podido acercarse a la música latinoamericana en estos últimos años? ¿Hay algún autor o músico latino que llame hoy su atención?
(R): Me pregunto sobre los primeros 490.000 años de nuestra humanidad, más que por los últimos 10.000.
(P): A lo largo de su carrera ha colaborado con múltiples figuras, no solo del jazz, sino también de la música popular y del rock. ¿Con cuál “artista nuevo” le gustaría colaborar en el futuro?
(R): Me alegra decir que aún no conozco a esa persona y siempre la estoy buscando.