A pocas horas de su concierto en Glasgow, Escocia, Guns N’ Roses suspendió su presentación a causa de problemas de salud de su vocalista, Axl Rose, quien en Londres tuvo que dormir una noche en el estadio del Tottenham, entre un show y otro, a raíz del mismo cuadro.
Lo último lo contó el propio músico durante el segundo recital del grupo en la capital inglesa, el 2 de julio pasado, donde reconoció que estaba sufriendo inconvenientes en su voz. Por lo mismo, se vieron obligados a tocar un set reducido de canciones (19), dejando fuera piezas emblemáticas como “November Rain”.
“Lamentablemente, debido a una enfermedad y un consejo médico, GNR no podrá presentarse en Glasgow. Estamos trabajando en las opciones de reprogramación para este espectáculo, así que conserve sus boletos y espere por actualizaciones. Apreciamos tu comprensión y paciencia”, informaron en un comunicado.
Se trata de un golpe bajo para GNR, que hasta este mes venía protagonizando conciertos de hasta tres horas de duración en el marco de su última gira mundial, “We’re F’N Back!”.
“Como pueden ver, tengo algunos problemas. Estos espectáculos son realmente importantes para nosotros, dormí aquí anoche”, explicó Axl en Glasgow para asombro de los presentes.
“Así que cambiaré las canciones de acuerdo a mi voz. Espero que no les importe. Realmente me gustaría seguir adelante”, dijo, ante los aplausos de sus seguidores.
El traspié en el estadio de Tottenham, sin embargo, tuvo un antecedente la primera noche, cuando el recital se inició con más de dos horas de retraso. Antes, en su paso por Noruega, la voz de Axl también despertó críticas.
La coyuntura de la banda preocupa a los fans de Guns N’ Roses en el mundo, pero sobre todo a los sudamericanos.
La banda arribará a la región este segundo semestre para ofrecer 16 shows en Brasil, Argentina, Colombia, Perú, Uruguay y Chile. En el país, el colectivo se presentará en el Estadio Nacional el próximo 5 de octubre, con estradas que se agotaron en cuatro días.