Tras la confirmación del fallecimiento de Tati Penna a sus 61 años, Cecilia Echeñique, una de sus compañeras en la recordada canción “No te quiero, no”, emblemático jingle que musicalizó la franja del “No” en el Plebiscito de 1988, despidió a la artista entre elogios y lamentos.
“Es un día triste, porque es una mujer que tenía tanta energía, que dio tantas cosas, que nos entregó tantas cosas bonitas… Que haya partido antes de tiempo siempre da mucha tristeza”, comentó a La Radio.
La intérprete coincidió con Penna en la escena artística capitalina que se desarrollaba, desde los ochenta y al margen del régimen militar, en escenarios universitarios y ligados al folk en lo que con los años se conoció como el Canto Nuevo.
Sobre las causas del deceso, Echeñique reflexionó: “(Tati) llevó su enfermedad con mucha valentía. Esclerosis Múltiple es una enfermedad muy dura, muy difícil, pero ella nunca perdió el sentido del humor, lo que fue increíble”.
La voz de “Cómo voy a renunciar a ti” prefiere recordar “todo lo que nos dejó: su voz maravillosa, unos discos de tango, toda la época que vivimos juntas, con el grupo Abril, en el Canto Nuevo en el Café del Cerro; vivimos esa época con tanta intensidad… Fue muy lindo”.
En la misma línea, Echeñique resumió: “Sólo sentir que nos ha dejado una tremenda mujer, una madre de dos niños muy amorosos, lindos, y que se va a quedar en nuestros corazones para siempre”.