Tras meses trámites y conversaciones entre Santiago y Miami, Drago, una de las promesas del reguetón chileno de este año, se convirtió en el primer fichaje local de Nabru Records, filial discográfica del afamado sello Rimas Entertainment, responsable de la explosión internacional de Bad Bunny y varios de los referentes del género urbano.
“Tuve una reunión con Noah Assad (cofundador y CEO de Rimas Entertainment) en el Ritz Carlton. Le mostré mis temas, hablamos un poco de música. Y ahora recién, días atrás, firmé el contrato”, cuenta Drago a BioBioChile, quien a sus 24 años trabajará con una de las firmas más respetadas de la escena a nivel mundial.
Drago formará parte de una decena de músicos chilenos con proyección que se sumarán a Nabru, y con ello, al universo de Rimas Entertainment, la matriz detrás del exitoso primer disco de Bad Bunny, X 100PRE, además de promotor de artistas como Lyanno, Amenazzy, Mora, Eladio Carrión, Urba & Rome y Young Martino, entre otros.
“En lo que se diferencia a otros sellos, es que ellos acompañan la visión del artista, y la potencia. Ahora voy a tener a mi disposición fondos para realizar los videos, y como yo quiera. Yo tengo pocos videos, y los que he hecho, han sido dirigidos por mí. Ahora voy a hacer lo mismo”, avizora el chileno.
Por ahora, la prioridad es su primer álbum: Majin Mood, un disco de aproximadamente 10 canciones que recoge en parte el nombre del famoso villano de Dragon Ball, Majin Boo, un demonio rosado tan tierno como peligroso cuyas transformaciones van acelerando el pulso de la serie. “Ese es más o menos el concepto”, adelanta Drago.
El oriundo de la población José María Caro de Lo Espejo se formó en la ShishiGang, colectivo del cual Pablo Chill-E destaca como su principal representante. Hasta antes del contrato con Nabru, trabajaba como uno más en el retail: “A veces llega gente y me reconoce y me pide fotos”, recuerda el joven de 24 años, aunque ahora deberá dedicarse a tiempo completo a la música.
En las plataformas de streaming, se ha hecho un nombre con canciones como Sohola y Mía. En YouTube, por ejemplo, Atraco con 2, uno de sus hits, ya supera los dos millones y medio de reproducciones.
El arribo de Nabru, lo resume así: “Es por el auge que esta teniendo la música chilena: Pablo Chill-E, Paloma Mami; ellos lo han hecho independiente. Entonces creo que se dieron cuenta que el mercado chileno es una buena plaza para generar entretenimiento, como lo fue Argentina y Colombia. Y me da gusto”.
Para Drago, la clave del arribo de Rimas Enterteinment y su filial es la nueva disposición de la audiencia local para el trap y sus derivados. “Hubo un cambio en el público chileno que empezó a aceptar la música, de ahí se fue para afuera, era inevitable que lo vieran”, agrega.
En el género urbano, un “palo” es una canción que va a pegar y va a tener una buena aceptación del público: un hit. Y según Drago, Majin Mood es una avalancha de palos. “Honestamente, tengo varios palos por salir. Yo creo que eso fue. Esto me pilló de sorpresa, yo iba a lanzar mi música de manera independiente, por temas de trabajo”.
A pesar de la rimbombancia que una carrera musical pudiera llevar, una de las principales prioridades del MC era mantener un trabajo estable: un contrato. “Antes de todo esto, esto era un hobby para mí. Yo trabajo, siempre he trabajado. Yo vivo solo con mi mujer y mi hija, y tengo que aportar dinero. Este contrato era lo que necesitaba: un plus para dedicarme 100% a la música”