El nudo central del texto de Flores es la relación fortuitamente virtual que establece la protagonista con el músico polaco Mariusz Duda, vocalista de Riverside, una banda de metal progresivo que, en un principio, se encuentra dando un concierto en Chile.

Bajo esta historia de atracción mutua entre la protagonista y el metalero polaco en que la escritora va desarrollando un relato cuya característica más importante es el reflejo de los tiempos actuales. Ingredientes cómo tecnología, interacciones en tiempo real y la construcción de conductas humanas verdaderas o falsas, entretenidas o aburridas; la presencia de amores aparentemente correspondidos o no correspondidos forman parte de éste.

También se destaca el rol de una ciudad cómo Santiago, que se erige como un escenario privilegiado de una narración en la que todo parece estar anclado en un limbo que poco a poco va atrapando a todos y cada uno de los protagonistas, como también al lector, a medida que avanza la narración.

De esta forma, este último va tomando palco frente a la relación de los distintos acontecimientos de la novela, la cual le da a quien la lee, la oportunidad de transformarse en un componente activo de los acontecimientos, fundamentalmente por la relación de éstos con las redes sociales de sus protagonistas.

Y es quizás este punto, una de las características más sobresalientes de Caer. Cada uno de los sucesos presentes en la novela son fruto de una acertada construcción de historias cotidianas, actuales, cercanas y muy presentes para el lector, en un período comprendido entre el surgimiento y desarrollo de la pandemia de COVID 19, como también la posterior vuelta a la normalidad.

Junto a lo anterior, Lilian Flores plasma en el texto una construcción de historias de vida de cada uno de los distintos personajes que dan movimiento a la novela, con una gran cercanía, lo cual ayuda a cautivar al lector página tras página y le ayuda a posicionarse como un testigo más de la narración.

“La primera ronda de Ramazzotis nos dejó paraditas, pero a la segunda ya estábamos confesándonos.

-Hueona, les juro que ya no lo aguantaba- comentó en voz baja, apoyando la sien en su mano derecha-. ¡Estaba tan fome! Medio avejentado, hasta caminaba arrastrando las patas. Y yo nada, po. Impeque, llena de vida. Así es que tiré el poto a la chuña -risas- carreteé y lo pasé la raja un rato. Hasta que me dio COVID -comentó, poniéndose seria de pronto- Estuve mal, re mal”.

Otro de los puntos importantes presentes en Caer es como Lilian Flores va haciendo de la tecnología un mundo de magia, ensueño y futuro, dentro de la vida cotidiana de la protagonista.

Es a través de la relación de ésta con el músico metalero polaco – a través de plataformas como Hangouts- donde se van manifestando las dudas, proyecciones, sueños y fascinaciones presentes entre los dos personajes.

Y esta es la tracción presente en el texto, que permite la puesta en escena de un final abrupto, pero que tiene la particularidad de entregar un mensaje para el futuro, tanto para los protagonistas de la novela, como para quien se sumerge en ella a través de la lectura, lo cual es sin duda un gran acierto de Liliana Flores Guerra.

En resumen, Caer es una novela entretenida, con personajes bien definidos y muy bien escrita. Una fotografía de nuestros tiempos.

Caer

Lilian Flores Guerra
Ediciones Del Gato
2024
ISBN 978-956-63-74-01-5