Cada 5 años, artistas de todo el mundo se reúnen en Documenta, una de las exposiciones de arte contemporáneo más prestigiosas del mundo. A partir de junio, la ciudad alemana de Kassel se transforma por 100 días en el epicentro del arte, gracias a este evento fundado en 1955 por el crítico alemán Arnold Bode.
En esta edición, Documenta15 se concibe para promulgar nuevas formas de colectividad a través del concepto indonés «lumbung» en el que se comparten los recursos de los miembros de un grupo libremente.
El evento es curado por primera vez por el colectivo ruangrupa que, desde el 2000, gestiona un espacio de arte en el sur de Yakarta y realiza exposiciones, festivales, publicaciones y radio. “Nuestro trabajo en Kassel será un proceso, una continuación de lo que llevamos haciendo desde hace dos décadas en Indonesia y durante los últimos años en otras bienales (Gwangju, Estambul, São Paulo, Singapur)”, adelantaron en entrevista a El País.
Lumbung of publishers
En el «lumbung de publicadores» se reúnen 22 proyectos editoriales independientes, cuya práctica y filosofía resuena con la colaboración y el trabajo colectivo. Desde marzo de este año, editores, gestores y cosechadores se han organizado a través de asambleas virtuales para crear una red internacional y compartir sus prácticas, estrategias y herramientas.
El lanzamiento oficial de esta red tendrá lugar desde el 6 al 10 de julio de 2022 en el edificio ruruHaus en Kassel. Allí se encontrarán Alice Yard, La Impresora, Bananafish Books, BOLOHO, consonni, Cooperativa Cráter Invertido, Erick Beltrán, HAMBRE, Jalada, Kayfa-ta, kuš!, Kutikuti, Marjin Kiri, microutopías, Nieves, Relámpago, Rotopol Press, Strapazin, Stripburger, David Kaiza, N’fana Diakite y Abdul Halik Azeez. Durante los 5 días estarán realizando activaciones, talleres, presentaciones, lecturas, exhibiciones y otras actividades.
HAMBRE
La iniciativa editorial lésbica HAMBRE busca amplificar el trabajo de mujeres y disidencias de América Latina. A través de fanzines, propaganda, talleres y activaciones, se experimentan las posibilidades políticas y creativas de publicar desde una perspectiva feminista.
“Nos inspiramos en la cocina como espacio de encuentro, colaboración y subversión de la ideología heteronormativa. Por eso, cada fanzine es una receta única, cocinada íntimamente con nuestras colaboradoras. Creamos publicaciones económicas con detalles hechos a mano y experimentamos con formatos no convencionales”, señalan sus integrantes Daniela y Camila.
Su catálogo está compuesto por cuentos, poesías, ensayos, dibujos y diarios que abordan el trabajo, el ocio, la identidad, el deseo y el día a día. “Con diseño feminista que rompe la jerarquía de las palabras, letras hechas a mano y técnicas de reproducción analógica, creamos experiencias en papel”, adelantan desde su producción.